Esta ensalada, con base de calabacín y garbanzos cocidos, es fresca, ligera, vegetariana y tiene un saborazo. No debes olvidar probarla porque será, casi seguro, de las que añadas a tu recetario habitual.
Ingredientes:
1 calabacín.
1/2 cebolla.
200 gr. de garbanzos cocidos.
6 tomates secos.
12 aceitunas negras.
Albahaca fresca.
Sal y sal Maldon.
Aceite de oliva.
Lavamos el calabacín y, sin quitarle la piel si está sanita, hacemos finas cintas ayudándonos de un pelador de patatas.
Sacamos los garbanzos del líquido de gobierno y los lavamos con agua.
Cortamos la cebolla en plumas o medias lunas muy finitas.
Escurrimos un poco los tomates del aceite en el que vienen y los cortamos en tiras.
Lavamos la albahaca y separamos las hojas de los tallos y estos serán desechados.
Montamos nuestra ensalada poniendo primero en un bol amplio, donde vayamos a servirla, las cintas de calabacín y la cebolla.
Añadimos al bol los garbanzos, agregamos un poco de sal y removemos los ingredientes del bol.
Agregamos los tomates secos en tiras y las aceitunas negras y volvemos a removerlo todo.
Por último, esparcimos por encima de nuestra ensalada las hojas de albahaca. Las pequeñas enteras y las grandes picadas groseramente. La rociamos con un generoso chorro de aceite de oliva y, por último, le ponemos unas escamas de sal Maldon por encima.
Servimos inmediatamente para que pierda la menor frescura y textura.
Fuente: este post proviene de Cocina sin Carné, donde puedes consultar el contenido original.
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