Es llegar el frío y las gachas se convierten en mi desayuno favorito. Mi último descubrimiento: las gachas de tarta de zanahoria. La verdad es que las suelo variar bastante, voy haciendo diferentes versiones según lo que tenga por casa. Me encantan porque siempre son un desayuno muy reconfortante y saciante.
Sientan genial y me recuerdan mucho a mi abuela de Alemania. A ella le encantaban las gachas y las semillas de lino.
LAS GACHAS Y LOS RECUERDOS GASTRONÓMICOS
Gran parte de los recuerdos gastronómicos que tengo están relacionados con ella. En su pequeño huerto también había perejil, eneldo, tomates y muchas flores. Sobre todo lavanda, eran sus preferidas.
No sabría con qué quedarme de todas las cosas chulas que había en su cocina: un utensilio para cortar el pan que salía mágicamente de dentro de la encimera y que funcionaba con una manivela, su tostadora que cuando terminaba de tostar el pan lo hacía volar por los aires, el corazón de galleta gigante que colgaba de su pared (siempre pensé que algún día me lo podría comer) o los caramelos de anís que había en una caja roja, al lado de los chicles, en el mueble.
Lo recuerdo todo cómo si fuese ayer. ¿No te parece que los sabores, los olores o la música son increíbles formas de viajar en el tiempo?
En la la banda sonora de mi cocina te he dejado una canción de la Alemania de los 50, se llama “Winke, winke”, la cantaba Evelyn Künneke.
INGREDIENTES PAR LAS GACHAS DE TARTA DE ZANAHORIA
1 vaso de leche de avena
2 cucharas soperas de copos de avena integrales suaves (he utilizado los de El Granero Integral)
1 cucharita de semillas de lino marrón o dorado
1 zanahoria pequeña lavada, pelada y rallada finamente
1 cuchara sopera de pasas
1 cuchara sopera de nueces picadas
¼ cucharita de canela molida
El interior de 1/2 de vaina de vainilla / ¼ de cucharita de vainilla en polvo
Una pizca de cardamomo
Una pizca de nuez moscada
½ cucharita de polen de abejas
Una onza de chocolate negro picado
PROCEDIMIENTO:
Ponemos al fuego en un cazo la leche, cuando rompa a hervir, añadimos los copos de avena, la zanahoria, el lino, las nueces, las pasas y las especias, excepto la nuez moscada. Removemos de vez en cuando para que no se pegue.
Dejamos cocinar durante aproximadamente 10 minutos sin dejar de remover. Añadimos la nuez moscada y servimos en un bol.
Espolvoreamos con polen y la onza de chocolate negro picado.
No te vas a creer lo deliciosas que están. Próximamente compartiré otra receta de gachas de avena, esta vez de tarta de manzana, para que puedas ir variando. Aún no sé cuál es mi preferida… las de tarta de calabaza también me tienen enamorada.
Espero que las disfrutes, nos leemos el jueves con unas IM-PRE-SIO-NANTES hamburguesas de azukis y quinoa que se han convertido en las preferidas de mi chico (súper carnivoro él, por cierto).
Y claro, recuerda,
Las recetas están para cambiarlas
¡Un abrazo enorme!