¡Estamos en pleno verano! Eso significa muchas cosas positivas como las vacaciones, época de relax y de descanso para poder hacer todo lo que no podemos hacer durante el resto del año por falta de tiempo, disfrutar de los peques de la casa, de la familia, irte al pueblo, a la playa o a la piscina, viajar. Como puedes ver, cosas positivas hay muchas. Y si tuviera que decir algo negativo sería... ¡EL CALOR! Me puede el calor, me supera. Pasarte el día encerrado en casa porque es imposible salir a la calle, no parar de sudar, ahogarte porque no hace ni una pizca de brisa fresquita. Además, aquí en Alicante el verano empieza un mes antes y termina un mes después, así que tenemos que estar bien preparados y tomar cosas fresquitas y ricas para hidratarnos.
Esta semana le hemos dado vacaciones al horno. No se me ocurriría encenderlo por nada del mundo. Nos apetecen cosas ricas, nutritivas, pero sobre todo, que sean refrescantes. Y creo que por primera vez nos hemos animado a hacer helado. Un helado casero que te encantará: HELADO DE CHEESECAKE DE CEREZAS. El sabor del cheesecake y el crujiente de sus galletas en forma de helado. ¡Una pasada para los amantes de los helados!
Aunque hemos hecho la receta utilizando una heladera (que por 30 euros puedes tener una fácilmente), también te vamos a explicar cómo hacer la receta sin tener que usarla. Verás lo sencillo que es, los pocos pasos que hay que hacer y lo rico que está. ¿Te quedas a ver la receta con nosotros?
INGREDIENTES:
ELABORACIÓN:
1. Lava bien las cerezas y quítales los rabitos y el hueso. No hace falta que queden mitades perfectas, ya que las vamos a pasar por la batidora.
2. Tritúralas con la batidora hasta que queden hechas un puré.
3. Pásalas por un colador para quitar todos los restos de piel, ya que luego resultan molestos a la hora de comer el helado. Reserva este puré para utilizarlo más adelante.
4. Pon el bol de la batidora y la varilla que vayas a usar para montar la nata (crema de leche) dentro de la nevera para que se enfríe. Así te resultará más fácil que monte. Una vez frío, pon la nata (crema de leche) también muy fría dentro con el azúcar glasé.
5. Bate a velocidad alta durante un par de minutos hasta que la nata (crema de leche) quede semi montada. Es importante que no monte por completo.
6. Retira la varilla de la batidora y añade el queso crema (tipo Philadelphia). Mézclalo bien con la nata (crema de leche) usando una lengua de repostería con movimientos envolventes.
7. Ahora vierte la leche y sigue mezclando bien.
8. Para endulzar y darle sabor le vamos a añadir un par de cucharadas de miel. También puedes sustituirlas por azúcar invertido. Si utilizáramos azúcar normal, se cristalizaría durante el congelado y después de notarían como cristalitos a la hora de comerlo.
9. Vierte también el puré de cerezas que habías preparado anteriormente.
10. Añade un par de cucharadas de mermelada de cereza. La que he utilizado tiene trozos de cereza y, además de aportarle sabor, le da un poco de color y unos tropezones que da gusto encontrar cuando te estás comiendo el helado.
11. Por último, y de forma opcional, puedes añadir unas gotitas de aceite esencial o extracto de cereza. Con poca cantidad conseguirás mucho sabor, así que no te pases echando.
12. Deberá quedarte una mezcla similar a ésta. Ahora tápala con film o papel de aluminio y déjala enfriar en la nevera un mínimo de 3 horas.
PROCESO DE CONGELACIÓN CON HELADERA:
1. Si tienes heladera en casa o la vas a comprar, ésta consta de tres partes: una carcasa exterior con una cubeta de plástico y una tapadera con un aspa que va girando y otra cubeta interior que se introduce dentro del congelador. Ésta última tiene que estar en el congelador al menos 48 horas antes de hacer el lado, ya que tiene dentro un líquido o un material que se congela y va haciendo que el helado se vaya enfriando poco a poco hasta estar cremoso y muy frío.
2. Una vez que el líquido del helado haya enfriado durante 3 o 4 horas, monta la heladera, pon la cubeta congelada en el interior, cierra la tapadera con el aspa y ponla en marcha. Es muy importante ponerla en funcionamiento antes de introducir el líquido para que éste no se quede pegado a las paredes. Con cuidado, vierte el líquido por el orificio que tiene la heladera.
3. Deja que la mezcla vaya mantecando poco a poco hasta ponerse cremosa. Según lo frío que esté, será suficiente con 30-40 minutos. Puedes ir comprobando poco a poco cómo se va convirtiendo en helado.
4. Una vez que esté cremoso, pica las galletas en trozos pequeños y añádelos al helado. Deja que dé un par de vueltas hasta mezclarse bien y apaga la heladera.
5. En este punto el helado se puede comer pero, para mi gusto, le falta consistencia y frío. Pasa el helado a un recipiente apto para congelador y deja que endurezca durante un par de horas.
PROCESO DE CONGELACIÓN SIN HELADERA:
1. Pon el líquido del helado en un recipiente, preferiblemente metálico (porque se enfría antes y conserva mejor el frío). Deja que repose en la nevera 30 minutos. Trascurrido este tiempo, remuevelo con un tenedor para deshacer los cristales de hielo y vuelve a congelar otros 30 minutos. Repite estos pasos durante unas tres horas hasta que el helado quede cremoso.
2. Si no tienes tiempo de estar pendiente del helado todo el día, deja que se congele durante unas tres horas y, antes de comerlo, pásalo por la batidora. Así romperás los trozos de hielo y conseguirás que quede cremoso y en su punto.
DECORACIÓN:
Puedes presentar el helado con un cucurucho de barquillo, en una tarrina, entre dos galletas o en copas para hacer una decoración tan apetecible como ésta. Recuerda sacar el helado unos 5 minutos antes de servirlo para que no esté tan duro.
1. Pon trocitos de galleta en el fondo de la copa y añade unas cucharaditas de mermelada de cereza.
2. Pon una bola de helado...
3. ...y otra más.
4. Para terminar, decora la copa con un par de barquillos, una cereza y un poco de sirope de fresa. ¡Casi ná!
Y así quedo este helado tan cremoso, sabroso y, a la vez, crujiente:
No me dirás que no te comerías ahora mismo una de estas copas bien fresquitas saboreando todos y cada uno de sus ingredientes. Con esta receta tendrás para hacer unas 6 copas dependiendo del tamaño de tu cuchara para helados.
Espero que la hagas en casa y te refresques tú y refresques a los tuyos comiendo este helado artesano hecho por ti.
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Te esperamos la semana que viene con una nueva receta, la última antes de las vacaciones de agosto. ¡No te la pierdas!
Un abrazo enorme.
Jon