Sí, lo sé... que no vengo nada en estos últimos tiempos... no por falta de ganas, si no de tiempo. Llegan las 9 o 10 de la noche y estoy destrozadita. Ni para leer me da, porque me quedo dormida en la primera página que abro el libro, o me pican los ojos o qué sé yo...
El caso es que, aunque tenga un poco dejado el blog, no paro de cocinar. Estoy practicando con el pan (a veces, me salen algunas barras muy dignas, lo de las hogazas ya es otra cosa), haciendo bollitos, molletes, magdalenas...
Tengo fotos almacenadas de platos que he ido preparando y fotografiando, pero sin poder hacer las entradas correspondientes. A ver si poco a poco, os puedo ir mostrando algunas.
En casa, al menos un día por semana, se come legumbres. Las lentejas son las más rápidas y fáciles de hacer para mí. Las hago sólo con verduras, al modo tradicional con su choricito y esas cosas, viudas (sólo con un sofrito), con arroz... pero quería probar una forma diferente de hacerlas. Sabéis que me gustan mucho las especias y este plato lleva unas cuántas. A mi costillo no le va tanto el tema "especiero", pero están buenas y no me puso ninguna reclamación. Estas mismas lentejas las hemos comido también con un poquito de arroz y quedan genial, con su puntito picante.
Bueno, que pongo la receta, que me lío yo sola... Está inspirada en un libro de cocina india de la editorial Parragon. Aunque, modificada y con lentejas pardinas (que son las que uso casi siempre). Las cantidades las he intentado aproximar, porque estos platos suelo hacerlos "a ojo".
Ingredientes (para 2/3 raciones):
Sobre 80 gramos de lentejas (pesadas en seco)
Unos 400 ml de agua
Una cc de cúrcuma molida
Un par de cs de aceite de oliva virgen extra
Una cucharada de café de comino, kalonji y semillas de mostaza negra (no una cucharada de cada una, sino entre las tres juntas). En la receta original, también lleva semillas de hinojo
3-4 semillas de fenogreco
Sal al gusto
Una guindilla seca picante
Una cs de zumo de limón
Cilantro fresco y tomate sin pepitas y en juliana para adornar el plato (opcional)
Preparación:
Lavamos bien las lentejas y las ponemos en un cazo con el agua, hasta que comience a hervir. Bajamos el fuego y dejamos que hiervan 5 minutos y añadimos la cúrcuma. Bajamos el fuego al mínimo y dejamos unos 20-30 minutos hirviendo, hasta que estén hechas las lentejas.
Este tiempo, para mí, es a ojo... cuando veo que están tiernas las lentejas. Si no es "a ojo", siempre está el diente: coger una lenteja y morderla para ver si ya está suficientemente cocinada.
Agregamos el zumo de limón y un poco de sal. Rectificaremos al final del guiso.
En una sartén calentamos aceite y, cuando está bastante caliente, añadimos las semillas de mostaza. Enseguida empezarán a saltar, bajamos al mínimo el fuego y añadimos las semillas de fenogreco, el kalonji y el comino. Ponemos también la guindilla y que se haga bien en el aceite. Apartamos la sartén del fuego y yo he retirado la guindilla para que no picara en exceso, también las semillas de fenogreco.
Vertemos el aceite de la sartén en el cazo de las lentejas. Apagamos el fuego y dejamos tapada la olla.
Cuando servimos las lentejas, podemos decorarlas con el cilantro y/o el tomate.
Quedan unas lentejas ligeras y picantes. Algo diferentes a lo que estamos acostumbrados... pero, ricas.Gracias por entrar en mi cocina