Delicioso y versátil, como entrante o plato principal.
Ingredientes:
3 puerros grandes
1 manojo de espárragos trigueros (10 ó 12)
4 huevos
200 ml de nata (crema de leche) ligera para cocinar
200 g de langostinos
Aceite de oliva virgen extra
Pan rallado
Sal, pimienta negra en grano Elaboración:
Precalentar el horno a 180º, arriba y abajo.
Eliminar la parte verde de los puerros, cortarlos por la mitad a lo largo, eliminar la primera capa, lavarlos y cortarlos a rodajas.
Eliminar la parte dura de los espárragos, lavarlos y cortarlos a rodajas gruesas.
Poner ambos a hervir en agua salada, durante unos 12. Dejar escurrir bien, presionando un poco, para eliminar el máximo de agua.
Eliminar las cabezas y las colas de los langostinos, pelarlos y cortarlos en dos o tres trozos, según tamaño. Reservar dos enteros para adorno. Secarlos con papel de cocina. Pueden ser congelados, en cuyo caso habrá que descongelarlos previamente y secarlos bien.
Batir los huevos en un bol, que queden espumosos. Salpimentar, añadir la nata (crema de leche) y mezclar con movimientos envolventes.
Añadir las hortalizas, los langostinos y mezclarlo todo.
Engrasar el molde con aceite, espolvorear con el pan rallado, darle la vuelta para eliminar el exceso. Verter en él la mezcla, introducirlo en un recipiente mas grande y hornear al baño maría, durante unos 30. Cuando falten un par de minutos, colocar los langostinos de adorno sobre el pastel.
Dejar enfriar y reservar en el frigorífico. Mejor frío, aunque se puede servir a temperatura ambiente. Podéis acompañarlo con unos picos camperos. Perfecto para tenerlo preparado con antelación. Podéis sustituir los langostinos por gambas. Reservad las cabezas para una salsa o fondo de caldo. Pueden ser también congeladas, siempre que sean de buen tamaño. Las gambas pequeñas peladas y congeladas, prácticamente “desaparecen” al cocinarlas. El tiempo de cocción dependerá de cada horno, en el mío son 30′. Veréis que se va dorando por los bordes. En todo caso, empezad con 30′ y comprobad el punto pinchando con un palillo en el centro. Ha de salir seco, como en las tartas.