No sé si conocéis la QUINOA. A mi me la recomendaron hace unos cuantos años, así que de vez en cuando la utilizo en sustitución de arroz, principalmente en ensaladas.
La quinoa es una semilla originaria de la Cordillera de los Andes, que se puede utilizar como cereal (de hecho se utiliza muchísimo como cereal), por lo que es estupenda para los celíacos, ya que no contiene gluten. Tiene un bajo índice glucémico, por lo que se aconseja para diabéticos y regímenes de adelgazamiento, y además ayuda a controlar el nivel de colesterol en sangre (tiene, por ejemplo, omega 3 y omega 6).
Su uso es bien sencillo: se enjuaga un poco bajo el grifo y a continuación, se hierve como si fuera arroz.
Os cuento también que el curry no es una especia en sí, sino una mezcla de especias procedente de India y Sri Lanka. Normalmente lleva cúrcuma (que es la que le da el color amarillo), jengibre, cilantro, pimienta negra, comino y granos de mostaza. Ésta sería, por así decirlo, la mezcla básica, que además es suave de sabor.
A esta mezcla básica se le pueden añadir guindillas, chiles (que darían lugar a los currys picantes), canela, nuez moscada...
Se puede decir que la mezcla depende de cada familia...
Como curiosidad, deciros que el curry en origen no lleva sal ni cardamomo, pero en las versiones europeas muchas veces se pueden encontrar.
La mezcla de especias hace que se estimulen los jugos gástricos y biliares, por lo que favorece la digestión. En los casos que lleva especias picantes, tiene efecto antiséptico
Pero vamos con la receta...
Vamos a necesitar (para 4 personas):
- 1 y 1/2 tazas de quinoa
- 1/2 cebolla mediana
- 1 diente de ajo
- 1 zanahoria más bien grande
- varias ramitas de brócoli
- 2 ó 3 cucharaditas de curry
- aceite, sal y pimienta
Colocamos la quinoa en un colador y enjuagamos un poco bajo el grifo.
Ponemos agua a hervir, con un pellizco de sal, e incorporamos la quinoa. Dejamos entre 12 y 15 minutos.
Por otro lado, picamos la cebolla y el ajo y sofreímos con aceite de oliva en una sartén.
Cuando empiece a estar transparente la cebolla, incorporamos la zanahoria, picada en brunoise, y varias "ramitas" de brócoli
Mientras, habrá terminado de hacerse la quinoa, así que escurrimos bajo el grifo y reservamos.
Pasados unos 10 minutos (en casa gusta que la verdura quede un poco "al dente") incorporamos la quinoa.
Añadimos un poco de pimienta negra recién molida y para terminar, añadimos el curry, dos o tres cucharaditas, según el gusto de cada uno.
Removemos un poco y servimos. Si queremos que quede más especial, podemos utilizar un aro...
Levantamos con cuidado, y a comer!!
¿Os apetece? Os dejo la receta lista para imprimir.
Con este post además participo en el Reto Recetas Sanas de facilisimo.com
¡Besitos!