Normalmente las usamos para hacer croquetas, purés, cremas, empanadillas? Pero en el plato estrella de esta estación, la ensalada, también podemos emplearlas. Con determinadas carnes, pescados, pastas y arroz podemos hacer multitud de ellas. También es una opción usar determinados ingredientes de los que tenemos excedentes o se están ?pasando? para aderezarlas. Toma nota de las ideas que te destacamos.
Los principales ingredientes
Cuando cocinas para más gente de lo habitual, es difícil ajustar la cantidad de ingredientes que necesitas y muchas veces sobran. Ocurre así, por ejemplo, si lo que preparamos es pasta o arroz. En ambos casos, si nos pasamos, podemos reservar el excedente en la nevera y al día siguiente hacer una ensalada añadiéndoles otros ricos alimentos. Esto supone una ventaja doble: ahorras dinero y tiempo de labor culinaria al día siguiente.El pollo asado que nadie ha terminado es otro ingrediente perfecto para hacer ensaladas. Su sabor cuando está frío es igual de bueno que recién cocinado. Desmenuzado o no, y acompañado de nueces y manzana es toda una delicia. También, si tras una celebración ha sobrado, por ejemplo, salmón u otro pescado ahumado y vemos que se va a 'poner malo', lo podemos usar para mezclarlo con unos langostinos, colocar esta mezcla sobre una cama de lechuga y aliñarlo con un poco de zumo de limón y aceite de oliva. Éstas son sólo dos recetas de las muchas que puedes preparar con estas sobras.
Ensalada de pollo y nueces (Receta de Mia_3)
Ingredientes: Pollo asado, nueces, canónigos, tomate, cebolla, aceite de sésamo tostado y vinagre de Módena.
Preparación:
Distribuimos en el plato los canónigos y, sobre ellos, el pollo, las nueces, el tomate troceado y varias tiras de cebolla. Por último, aliñamos con el aceite y el vinagre.
Aliños especiales
No sólo el aceite y el vinagre nos sirven para darle sabor a nuestras ensaladas. Podemos utilizar, para ello, salsas de todo tipo. Si nos ha sobrado salmorejo de otro día, podemos emplearlo, por ejemplo, como salsa para acompañar ensaladas de pasta. De igual forma, el guacamole puede dar un toque muy exótico a nuestra combinación fría de ingredientes.
Las salsas hechas con distintos tipos de quesos acompañan a muchas ensaladas. La Roquefort, por ejemplo, es una de las más famosas. Si tienes un solitario pedazo de queso azul en la nevera, mézclalo con leche, mantequilla, cebolla y nuez moscada y obtendrás un rico aderezo. También los yogures a punto de caducarse, y con pocos candidatos para comerlos antes de esa fecha, pueden usarse para salsas. En la ensalada salsiki tienen un papel protagonista.
Ensalada mixta con gazpacho (Receta de Ukiko)
Ingredientes: Lechuga, 1 tomate, aceitunas negras, aceite de oliva y gazpacho espeso o salmorejo.
Preparación:
Distribuimos en un plato la lechuga y el tomate cortado en gajos. Echamos un chorreón de aceite de oliva y colocamos las aceitunas negras. Situamos un cuenco con gazpacho en un lado de plato para echar sobre los ingredientes la cantidad deseada.
Ver con qué ingredientes contamos, combinarlos de la mejor forma y darles un toque diferente con salsas creadas con lo que tenemos a mano, nos hará enriquecer nuestra dieta, pero no empobrecer nuestra economía.