Hoy os propongo y recomiendo que hagáis estas rosquillas de pan con aceite y orégano, son deliciosas, fáciles de hacer, y quedan... ¡¡deliciosas!!
Cuando se las vi a mi amiga y maestra panadera Marisa , Thermofan, me dije que no pasaría mucho tiempo hasta que las hiciera, y cuando nos invitó a participar en el 6º aniversario de su blog, tuve claro que las haría.
Como ella dice, doblaz las cantidades, porque se quedarán cortas, quedan tan ricas que no puedes dejar de comerlas, solas, sin necesidad de acompañarlas de nada...aunque si le ponéis un buen jamón o queso, ya serán irresistibles...
Muchas gracias Marisa, por tantas y tan buenas recetas que nos enseñas y espero que por mucho tiempo sigas deleitándonos con ellas.
Ingredientes:
- 300g de harina de fuerza
- 1 sobre de levadura seca de panadero (7g) o 15g de levadura fresca
- 180g de agua templada
- 15g de aceite de oliva
- 1 cucharadita de sal
- aceite y orégano para pintarlas
- escamas de sal para poner por arriba
Con robot de cocina:
En un cuenco ponemos la levadura y el agua templada y la diluimos, la dejamos reposara 5 minutos.
En la cubeta de la amasadora ponemos la harina y la sal, las mezclamos y añadimos la levadura diluida en el agua templada. mezclamos y añadimos el aceite, dejamos amasar unos 5 minutos.
De forma tradicional:
En un cuenco ponemos el agua templada y añadimos la levadura, la diluimos y dejamos que repose 5 minutos, añadimos la harina, la sal y el aceite y amasamos hasta que todo quede bien integrado y la masa sea lisa y elástica, manejable. Si no es así añadimos un poquito más de agua o harina, según creamos que necesita...
El resto todo igual que con la amasadora...
Sacamos la masa y la ponemos en un cuenco untado con aceite, la tapamos y dejamos que doble su volumen en un lugar cálido.
La sacamos, la amasamos un poquito para desgasificarla y la estiramos con el rodillo en forma rectangular. La cortamos en trozos de unos 10cm de largo por 1-2 cm de ancho.
Hacemos un rulo con cada uno de esos trozos, como se ve en las imágenes y lo anudamos , metiendo los extremos para adentro.
mezclamos el orégano con un poco de aceite y pintamos las rosquillas, les ponemos unas escamas de sal por encima y las horneamos con el horno precalentado a 180ºC con un cuenco con agua dentro durante 20-30 minutos, hasta que veamos que están doraditas por encima.
Las sacamos y dejamos enfriar encima de una rejilla...
¡Están buenísimas, solas y acompañadas!
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