NECESITAMOS LOS SIGUIENTES INGREDIENTES:
500 gr de mantequilla (que sea buena, es importante)
500 gr de harina
500 gr de azúcar
6 huevos ( si puede ser caseros o en su defecto camperos)
Una cucharada de miel
LOS HACEMOS ASÍ DE FÁCIL:Lo primero es preparar los moldes, yo los he hecho con papel de barba de la marca guarro que encontré en una librería donde los cogía mi madre. Con papel de hornear para hacer moldes individuales no vale, ya que es demasiado fino, si no encontramos los papeles, siempre podemos forrar un molde rectandular y hacerlo en plan megasobao, queda estupendo también.
Tamizamos la harina y reservamos.
Encendemos el horno a 190º para que vaya calentando.
Batimos la mantequilla a punto pomada con el azúcar y la miel durante unos 10 minutos, tiene que quedar muy cremosa, es la base del bizcocho ya que no le vamos a poner levadura.
Añadimos los huevos uno a uno, no echando el siguiente hasta que no este bien integrado el anterior.
Cuando hemos añadido todos, echamos la harina poco y la mezclamos con movimientos envolventes hasta integrarla bien.
Ponemos en los moldes ( o en el molde de megasobao) e introducimos en el horno hasta que están dorados, aproximadamente 18/20 minutos.
El resultado son unos sobaos tiernos , tiernos
Y con un sabor a mantequilla increible...Solos están de muerte, pero si los acompañamos con un café con leche para la merienda ya es la bomba.
Adoro los sobaos, pero si que es verdad que son altamente calóricos, así que no debemos abusar, pero un capricho de vez en cuando no mata a nadie, eso sí, solo de vez en cuando, que no hay que pasarse.