Los tallarines de calabacín se preparan muy fácilmente con un simple pelapapas o con un rallador, aunque si investigas un poco por internet, verás que hay espiralizadores y distintos utensilios para hacer auténticos espaguetis de calabacín, con su forma redondita y todo. Pero nosotros nos quedamos con la opción sencilla, el pelapapas de toda la vida! ;) Puedes mezclarlos con las salsas que quieras, como si fuera pasta, o combinarlos con verduras. Son una alternativa perfecta si no te gusta comer pasta de noche pero tienes antojo, o si estás a dieta, pues el calabacín es muy bajo en calorías.
Por otro lado, la salsa pesto tradicionalmente se hace triturando hojas de albahaca, ajo, piñones, parmesano y aceite, pero hay múltiples formas de prepararla con ingredientes de lo más variado. Nosotros nos hemos decantado por hacerlo con brócoli y unas nueces que teníamos por casa. El brócoli es un alimento muy recomendable para incluir en nuestra alimentación: es rico en proteínas, vitamina C, hierro y es un potente anticancerígeno.
La salsa pesto de brócoli se conserva bien en la nevera. Si tienes algún tipo de queso vegano estilo parmesano, puedes añadir un trozo al batir. Puedes emplear esta salsa en tus platos de pasta, ensaladas, tostadas, arroces... lo que quieras :)
Ingredientes para dos personas:
Un calabacín grande.
Una unidad de brócoli.
Una taza de aceite de girasol.
Dos dientes de ajo.
30 gramos de nueces peladas.
Zumo de medio limón.
Sal.
Pimienta negra.Dificultad: muy fácil.
Tiempo aproximado: 10 minutos.
Elaboración:
Cortamos los tallos gruesos del brócoli y lo ablandamos durante unos minutos en agua hirviendo. Este paso es opcional, podría ponerse en crudo.
En el vaso de la batidora ponemos el brócoli ya escurrido, los dientes de ajo pelados, las nueces, el aceite, el limón, la sal y la pimienta negra. Batimos bien, que quede una salsa espesa, pero no demasiado líquida. Ya tenemos nuestro pesto. Lo podemos conservar en botes de cristal en la nevera durante varios días.
Para hacer los tallarines, simplemente es pelarlos y con un pelapapas ir cortando tiras finas a lo largo. También podríamos hacerlo con un rallador. Ponemos sal por encima y ya están listos para comer, simplemente hay que poner el pesto de brócoli por encima :)