Bon appétit amig@s,
Hacía tiempo que quería hacer esta tarta. Y es que tiene una presentación espectacular y además esta buenísima. Admito que es un poco laboriosa pero merece la pena. Para quedar como auténticos “Chef” ante nuestros invitados jaja.
En este caso utilizo calabacines y zanahorias para formar las flores pero también se podría poner calabacines y salmón por ejemplo.
Y todo sobre una base muy sabrosa: la salsa Mornay. No muy conocida y tremendamente sabrosa, es una béchamel enriquecida con yema de huevo, nata (crema de leche) y queso
Ingredientes:
-Una masa de hojaldre
-3-4 calabacines
-3-4 zanahorias
Para la salsa Mornay:
-500 ml de leche
-50 gramos de mantequilla
-50 gramos de harina
-100 ml de nata (crema de leche)
-1 yema de huevo
-Nuez moscada
-Sal-pimienta
Empezamos lo mismo que para preparar la salsa béchamel:
Fundimos en una cacerola la mantequilla y añadimos la harina. Con una varilla o cuchara de madera y a fuego medio cocemos unos instantes la harina hasta formar un “roux” – masa de mantequilla y harina que toma el color rojizo. Es el momento de verter la leche y seguir removiendo continuamente hasta que la salsa espese.
Truco: Es conveniente hacerlo a fuego medio durante unos minutos.
Salpimentamos y añadimos un poco de nuez moscada.
Por otro lado batimos la yema con la nata (crema de leche) y cuando la salsa béchamel esta un poco tibia, se la añadimos así como el queso rallado y seguimos removiendo hasta que el queso esté totalmente fundido. Dejar enfriar .
Forramos nuestro molde con la masa de hojaldre y pinchamos el fondo con un tenedor. Vertemos y cubrimos todo el fondo con la salsa Mornay
Ahora toca la parte más laboriosa: cortar en finas tiras los calabacines y las zanahorias.
Truco: Yo he utilizado un pelador de verduras de forma que todas las tiras tengan el mismo grosor.
Ponemos una tira de calabacín, encima una de zanahoria y enrollamos. Ponemos estos rollitos sobre la masa con la salsa Mornay hasta cubrirla por entera. Vertemos un hilo de aceite de oliva sobre “las flores”.
La horneamos a 180 grados grados durante unos 50 minutos
¡El esfuerzo ha merecido la pena, es espectacular y sabrosísima!
Bon appétit Mama
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