- 3 huevos grandes.
- Un puñado generoso de gambas.
- 2 dientes de ajo.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Sal y un poco de perejil.
Si las gambas son congeladas lo primero que debéis hacer es descongelarlas y retirarles todo el agua. Echáis un poco de aceite en la sartén y ponéis a dorar el ajo cuando está un poco dorado añadís las gambas, si son pequeñas no hace falta cortarlas. Las cocináis y las reserváis en un plato.
En un bol batís los tres huevos con un poco de sal y perejil picado, añadís las gambas y le dais varias vueltas. Echáis un poco de aceite en la sartén donde habéis frito las gambas, si las habéis escurrido bien no tiene por qué quedar agua, pero si hay se la quitáis. Añadís toda la mezcla del bol a la sartén y lo dejáis un par de minutos hasta que se cuaje, es importante que no se pegue la sartén, cuando ya veis que esta cocinado le dais la vuelta a la tortilla con un plato. Esta operación la hacéis tantas veces como creáis necesarias hasta que la tortilla esté bien cuajada. Luego la sacáis a un plato y ya está lista para comer.
Gasto: 2 euros
Raciones: 2 personas.
Dificultad: Fácil.