La tortilla de patatas (tortilla española la llaman fuera de nuestros lares) es uno de nuestros platos icónicos.
Con tres productos básicos en cualquier despensa: patatas, huevo y aceite de oliva virgen (más la cebolla o cebolleta que a mí me parece imprescindible en la tortilla) se prepara un plato sabroso y delicioso.
En este caso he incorporado unas perlas de trufa de la marca Espora Gourmet (pincha aquí) que le dan un sabor y un aroma espectacular y la convierten en una tortilla gourmet de primera.
En mi casa nos gusta la tortilla jugosa, con su huevo semilíquido, pero si os gusta más cuajada no hay más que dejarla hacer un ratito en la sartén.
También las he hecho en formato individual, con dos o tres huevos, según tamaño, para degustarla sin prisa cada uno.
Para 4 personas:
4-5 patas medianas
1 cebolla o cebolleta
8 huevos grandes o 12 medianos
aceite de oliva virgen extra
perlas de trufa
sal
brotes de alfalfaSe pone abundante aceite de oliva a calentar en una sartén para que las patatas cortadas se sumerjan bien en él.
Se van pelando las patatas, se lavan y se trocean en trozos no muy grandes (no importa que sean irregulares). Se pica la cebolla.
Se añaden las patatas y la cebolleta a la sartén:
Se deja que se vaya pochando despacito, con fuego no muy alto con un poco de sal.
Una vez hechas, se escurre el aceite con ayuda de una espumadera, se reserva, y se dejan templar:
Se baten los huevos (dos o tres, según tamaño), no en exceso, y se les añaden las patatas ya hechas y las perlas de trufa:
Se pone en una sartén pequeña un poco del aceite sobrante de freír las patatas y se calienta. Se añade la mezcla de huevo y patata y se deja un par de minutos para que se cuaje:
Se la da la vuelta a la tortilla con ayuda de un plato grande o de una tapadera y se cuaja por el otro lado:
Se hacen el resto de las tortillas y se comen, recién hechas, espolvoreando con brotes de alfalfa y de unas perlas de trufa.