En este vasito hay todo un mundo concentrado, fusionado. Aguacate, granada y dátiles. El primero tiene sus orígenes en América Central (México y Guatemala). La granada nos vino de Oriente, de la antigua Persia. Y los dátiles, de los palmerales del norte de África. Parece mentira que tres productos de orígenes tan lejanos puedan juntarse en este pequeño vasito que puede servirse como un aperitivo navideño distinto, original y que nos hará viajar a mundos exóticos.
RECETA
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INGREDIENTES
2 aguacates
2 granadas
1 limón
6 dátiles
2 hojas de gelatina
Unas hojitas de menta
PREPARACIÓN
Poner las hojas de gelatina (4g) en agua fría durante 5 minutos.
Quitar los huesos a los dátiles y echar en el recipiente de la batidora.
Partir los aguacates por la mitad, quitar el hueso y triturar con los dátiles y el zumo de limón.
Repartir la crema en vasitos con ayuda de una manga pastelera. Dar unos golpecitos a los vasos colocados sobre un paño de cocina para igualar el nivel y meter en la nevera.
Desgranar las granadas partiéndolas por la mitad y golpeándolas con el mazo del mortero. Reservar unos granos para la decoración y pasar el resto por un pasapurés hasta obtener 300 ml aproximadamente. Calentar unas cucharadas del zumo de granada y una vez esté caliente añadir la gelatina escurrida. Mezclar hasta que se disuelva. Añadir el resto de zumo de granada.
Verter en los vasitos encima de la crema de aguacate y meter en la nevera hasta que la gelatina cuaje (2 horas aproximadamente).
Adornar con unos granos de granada y una hoja de menta.