Esto de los propósitos que hace una al acabar el verano es lo que tiene.....dieta, deporte, comida sana.....y qué trabajito cuesta, pero es que no queda más remedio.
Este plato es facilísimo de preparar y además apenas lleva grasa, así que nos viene genial para ir quitándonos esos kilitos que hayamos pillado en verano.
A mí tal cual me ha encantado, aunque si os apetece, podéis acompañarlo con patatas cocidas, o alguna verdura.
Así que pasamos a la acción....
Ingredientes:
2 pechugas de pollo (500 gr aprox)
2 cebollas (500 gr aprox)
1 limón
2 dientes de ajo
Una cucharada de tomillo
una ramita de romero
Sal
pimienta
Aceite
1. - Encendemos el horno a 180º. Pelamos y frotamos con los dientes de ajo una fuente de horno. Dejándolo en la fuente después.
2.- Salpimentamos las pechugas con la sal, la pimienta y las colocamos en la fuente.
3. - Rociamos con un poco de aceite de oliva y les exprimimos el limón por encima.
4. - Cortamos la cebolla en tiras y las ponemos en un bol, donde le echaremos una cucharadita de sal, el tomillo y el romero, y lo removemos bien.
5. - Cubrimos las pechugas con la cebolla, le ponemos un poco de aceite y tapamos la fuente con papel de aluminio.
6. - Metemos en el horno 30 minutos, y pasado ese tiempo, destapamos y volvemos a meter hasta que se dore la cebolla un poco. Unos 20 minutos más.
7. - Y solo queda colocar en el plato, acompañar de las cebollas y lo que se nos antoje, y a comer!!!!!!
Qué os parece??????
Ha quedado estupendo!!!
Apto para las dietas......