En esta ocasión lo he acompañado de una bechamel vegetal, de manera que cambiando las gambas por almendras, seitán o por ejemplo tofu se convierte en un plato vegano, aunque yo le he añadido un toque de miel completamente opcional. Además es apto para celíacos pues no contiene gluten.
Ingredientes para 2 raciones
120gr. brócoli
1 boniato
1 puñado de gambas (opcional)
250ml. leche de almendras
1 cucharadita de tahín
1 cucharadita de miel
2 cucharadas de harina de mijo o maíz
pan rallado (opcional)
sal y ajo en polvo
Hervimos el brócoli y el boniato previamente lavados y troceados.
Salteamos las gambas con ajo y sal.
Elaboramos la bechamel: en una sartén colocamos el tahín, junto con la harina. Pasados unos segundos añadimos la leche y dejamos que espese sin dejar de remover. Le añadimos la miel y salpimentamos al gusto. Mezclamos bien.
Colcamos todo en una fuente de horno. Cubrimos con la bechamel y opcionalmente esparcimos por encima un poco de pan rallado. Gratinamos 10 minutos y listo.
Os dejo con un platico para que podáis disfrutar