A mí me encanta. De hecho, la uso entre otros con las ensaladas de legumbres, bocatas, hamburguesas... Así que os voy a presentar una manera muy sencilla de hacerla y libre de lácteos (los intolerantes a la lactosa se van a alegrar). Además, ni se corta ni nada y la podéis guardar varios días en el frigo. No sé si aguantará bien la congelación porque cuando la hago en casa la verdad es que dura poco.
Respecto a la consistencia, a mí me gusta prepararla espesita, pero podéis ajustarla a vuestro gusto. Es por ello que las cantidades que os propongo son orientativas. No temáis experimentar, porque no os vais a equivocar, os lo aseguro.
La base va a ser el anacardo crudo, así que como en recetas anteriores, recordad poner en remojo de 4 a 6 horas antes (o la noche anterior). Truco: si tenéis prisa, metedlos en un recipiente con agua caliente 20 min.
INGREDIENTES:
125 gr. aprox. de anacardos crudos remojados previamente
100 ml. de agua (algo menos de medio vaso)
Un chorro de zumo de limón exprimido
1 pizca de sal
PREPARACIÓN:
1. Introduce los ingredientes en la batidora y bate hasta obtener la consistencia deseada.
2. Rectifica de sal y limón si es necesario y bate otra vez.
3. Guarda la crema agria en un bote de cristal en el frigorífico.
Trucos: Puedes personalizar esta salsa añadiendo perejil, ajo, pimienta, cilantro... atrévete a crear nuevos sabores.
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