Llevaba tiempo intentando entrar en la cocina Tailandesa, pero siempre me daba pereza ponerme a buscar ingredientes y demás. Por fin decidí ir a un Supermercado Oriental en Sevilla y me di cuenta del tiempo que he perdido, porque todo lo tenían allí y yo sin saberlo. Me abastecí de lo elemental, salsa de pescado, lima Kafir, Curry verde., y me puse a disfrutar de este tipo de cocina tan original, aromática, picante y sabrosa.
Es impresionante, pero picante. Aunque ellos, usen aceites vegetales neutros para sus guisos, yo por ahí, no paso, continúo con mi aceite de oliva virgen extra, lo siento, por lo demás muy cercano a su cocina.
Para 4, necesitamos
1Kg. De pollo, yo usé muslos cortados en dos
1 cucharada de curry verde. Pica de por sí mucho, aunque si queréis ser estrictos son 2 cucharadas
2 calabacines cortados en gajos grandes
Albahaca en trozos grandes, generosos, como 8 ó 10 hojas grandes
Lima Kafir, como 6 hojas cortadas en juliana, sin el nervio, es aromática, deliciosa.
3 cucharadas de aceite de oliva viren extra
3 cucharadas de azúcar
Leche de coco 1 ½ latas
3 cucharadas de salsa de pescado
Un trozo de pimiento rojo y cebolla fresca cortadas en juliana.
Pues nada. Ponemos en un Wok o en un perol, al aceite de oliva virgen extra con el pollo, salpimentado, a fuego medio, para marcarlo simplemente. Yo usé mi maravilloso Wok, de hierro forjado, enamoradito me tiene. Una vez cambie de color, lo apartamos y reservamos. En ese aceite, ponemos la pasta de curry y al cabo de un par de minutos ½ lata de leche de coco. Cuando está ligado ambos ingredientes, añadimos el pollo y la lima Kafir. Salteamos y añadimos otra ½ lata de leche de coco, la salsa de pescado, el azúcar y cubrimos el pollo con agua o caldo de pollo, como queramos.
Dejamos cocer unos 40 minutos, hasta que el pollo esté tierno. Ahora añadimos el calabacín, dejamos cocer unos 5 minutos, y ponemos el resto de leche de coco, la albahaca, el pimiento y la cebolla. Tapamos y dejamos reposar unos minutos.
Lo vamos a acompañar con arroz blanco. Pica, os lo advierto, pero es una delicia, llena de sabores, aromas y texturas, de un frescor maravilloso. En casa, pese a que no son muy de picante, lo disfrutaron un montón. Así que nada, besos a todas, a todos, a.., besos.