Las ensaladas turcas son muy variadas. Muchas de ellas, como en este caso, tienen como aliño una salsa de yogur hecha a base de yogur griego, sal y ajo. Una salsa sencilla y deliciosa, con un toque fresco, que no es tan contundente como la mayonesa. Además, en este caso, los ingredientes no son muy abundantes, lo que la convierten en una ensalada perfecta para paliar cualquier apuro.
Yo la hice este fin de semana, que tuve una comida con amigos. No la puse como plato principal, sino que fue acompañamiento, para que los invitados picaran mientras estábamos en el primer plato. Una opción fresca que nunca viene mal en estos días de calor. El toque de hierbabuena le da el toque definitivo a esta ensalada.
Esta ensalada turca puede convertirse en uno de los platos que más prepararéis este verano. Fresca y sencilla, ¿qué más se puede pedir?
TÍTULO DE LA RECETA Dificultad: Fácil
Horneado: Sin horno
Tiempo: 20 mins
Temporada: Verano
Raciones: 4 personas
Etiquetas: Ensalada
Trotamundos: Asia
INGREDIENTES
Dos zanahorias
Un calabacín
220 gr de yogur griego
Una pizca de sal
Dos dientes de ajo
Aceite de oliva
Aceite de girasol
Un puñado de hojas de hierbabuena o menta
CÓMO SE HACE- Pelamos y rallamos el calabacín y las zanahorias.
- En una sartén amplia, rehogamos el calabacín y las zanahorias durante 10 minutos con aceite de girasol. Quitamos del fuego y dejamos enfriar por completo. Yo dejo que se enfríe y lo meto en la nevera durante un par de horas.
- Picamos el ajo muy finito y lo mezclamos bien con el yogur y la pizca de sal.
- Picamos las hojas de hierbabuena.
- Mezclamos el yogur con las verduras y la hierbabuena.
- Metemos en la nevera hasta el momento de servir.
- Servimos en frío con un chorrito de aceite de oliva.
¡A disfrutar!