Ingredientes:
500 gr. de carne picada de canguro.
2 cebollas medianas.
1/2 vaso de vino tinto.
canela, sal y pimienta.
aceite de oliva.
Ponemos nuestra carne de canguro en un cuenco, salpimentamos e introducimos en la nevera tapado con un papel film.
Picamos la cebolla como para sofrito, y la vamos pochando a fuego lento en 3 cucharadas de aceite de oliva y removiendo continuamente.
Cuando veamos que la cebolla va pasando de un color amarillento al marronáceo, añadimos a la sartén el vino, una pizca de canela y dejamos caramelizar a fuego lento durante 20 minutos. Podemos añadir una cucharadita de azúcar o no. Trascurrido ese tiempo, probamos la cebolla y salpimentamos ligeramente.
Retiramos la mitad de la cebolla a una salsera para utilizar después, en el emplatado de las hamburguesas.
Incorporamos la cebolla restante, picada y caramelizada, a la carne de canguro salpimentada, mezclamos muy bien y dejamos en la nevera durante una hora más para darle tiempo de integrarse a todos los sabores.
Formamos las hamburguesas del tamaño que prefiramos y las pasamos por la sartén, que tendremos al fuego con el aceite caliente, unos 3 minutos por un lado y 2 por el otro.
Podemos tomarlas sin pan, acompañadas de una cucharada de la cebolla caramelizada que habíamos reservado, o de la forma tradicional, con un buen pan de hamburguesas y acompañadas con lechuga, tomate y cebolla.