Cuando hablamos con Meli de crear un blog, me dijo que quería incluir además de las manualidades, recetas de cocina, le dije que aunque a mi siempre me ha gustado mucho cocinar no me sentía capaz de postear porque por lo general cocino cosas muy sencillas y que en lo posible no me quiten mucho tiempo. Me encanta inventarme "recetas" e improvisar un poco, pero la verdad que siempre ando corriendo, así que esos inventos por lo general son para no demorarme mucho haciendo algún plato y salir rapidito a hacer el resto de cosas.
Para mi sorpresa, me dijo que eso era precisamente lo que quería, que compartiéramos recetas que fueran sencillas y rápidas de hacer, así es que por eso hoy les quiero mostrar una de esas opciones que por ser tan sencillitas hasta da pena llamarla receta jejeje, pero digamos que son las instrucciones para hacer una cena o merienda bien resultona y que por lo menos en mi casa gusta tanto a grandes como a chicos, y créanme que en mi caso, no tengo muchas opciones que cumplan con las dos.
Una de mis debilidades es el hojaldre, por supuesto no me pondré a hacerlo jamás, porque le tengo mucho respeto y requiere mucho tiempo y pericia a mi parecer, así que lo que hago es que lo compro hecho. Para mi fortuna, aquí en Monterrey lo encuentro en todos los supermercados, pero sé que en Barranquilla también es fácil de conseguir (en la Olimpica, por ejemplo), porque igual los preparaba allá. Así que empecemos...
Aqui van los ingredientes:
1. Masa de hojaldre (ya lista).
2. Queso (el de su preferencia)
3. Bocadillo o mermelada (o cualquier otro complemento que guste)
Y ya con eso tenemos, que a mi la masa de hojaldre me gusta hasta sola, pero como dice mi esposo, si no tiene proteína no es comida.
El primer paso sería cortar en tiras largas el queso y el bocadillo o el relleno que ustedes hayan elegido, tal como se ve en la foto, que si es mermelada, es sólo untar y luego pasamos a enrollar.
No hace falta una técnica especial, aqui les muestro en la imagen como lo hago yo.
Hay que tener especial cuidado al momento de cerrarlos, para que con el calor el queso no se salga, así que yo lo que hago es humedecer un poco el hojaldre con mis dedos mojados de agua y presionar con cuidado para sellar bien (Aunque confieso, que no todas las veces me funciona, porque en algunos el queso insiste en salirse).
Y para los croissants, les muestro:
Con los trozos de hojaldre que me quedan (como sin forma) hago un pequeño envuelto así:
Y listo, lo demás es hornear. Al principio ponía el horno bien bajito, como a 150°C y se demoraban muchisimo en hacer, pero no querían que se me quemaran. Ahora los pongo como a 250°C, están listos en menos tiempo pero tengo que estar muy pendiente para que no se me quemen. Mi consejo es que vayan graduandole el calor o si ya tienen total control del calor de su horno, pues háganle.
En estar listos se demoran unos 15 a 20 min, pero hay que ir revisándolos hasta que estén doraditos.
Este es más o menos el color... traté de acercarme lo más que pude je. Aqui se ve uno con quesito afuera (los preferidos de mis esposo) y el otro enterito.
Espero les haya gustado, aqui en esta casa todos somos fanáticos y lo mejor de todo es que se pueden guardar ya horneados los que queden en la nevera y comer otro día, yo me los como hasta fríos.
Que relleno les gusta más para el hojaldre, dulce o salado?
Mmmmm, A mi... dulce. Ruby.