Su trabajo le gustaba
No importaba lo dura que fuera la noche ni la cantidad de gestiones que tuviera que resolver
No, eso no era
Pero últimamente temía cruzar aquella puerta
Se bajaba del coche y cada paso que daba sentía como una fuerza centrífuga que la clavaba al suelo. Cada paso, su cuerpo más pesado, resistiéndose a seguir avanzando, un nudo en el estómago, como un malestar inespecífico
No quería ir a trabajar
No queria ver a toda aquella gente que no le aportaba nada. No los sentía como amigos, después de tantos años
Algunos aún le arrancaban algunas risas. Era la costumbre, la cotidianeidad, lo conocido
Pero no quería estar en ese lugar
No quería estar allí
El humor le cambiaba. Entre un desánimo descorazonador y un enfado permanente, ocho horas de malestar
Si conseguía pasar la noche sin darse cuenta era todo un logro
Al salir, volvía a sentirse ligera, volvía a respirar hondo y el malestar desaparecía de su cuerpo y de su mente
Cada kilometro que le acercaba a casa iba recuperando su estado normal
Un poco de euforia, incluso, por el peso del que se despojaba cada mañana cuando volvía a casa, con su familia
No sabía qué le podía estar pasando
Alguna vez incluso se le había caído alguna lágrima mientras conducía a su lugar de trabajo
Sabía que no era normal
Esa situación se estaba convirtiendo en una angustia permanente. Una contractura tensional diaria que transformaba su cuello y su espalda en una roca
Pero a ella le gustaba su trabajo
O eso pensaba
PD Cuento inspirado y dedicado a Sonia Caballero Vate
INGREDIENTES
4 lomos de merluza
4 dientes de ajo
Harina
250 ml de caldo de pescado o 250 ml de agua + 1 pastilla de caldo de pescado
150 g de avellanas peladas
Aceite
Sal
Perejil
ELABORACIÓN
Salar los lomos de merluza
Enharinar
Pelar y laminar los ajos
Triturar la mitad de las avellanas
La otra mitad de las avellanas cortarlas por la mitad
En la cubeta poner aceite
Menú Cocina
Dorar ligeramente los ajos con las avellanas en mitades
Añadir los lomos de merluza y freír 3 minutos por cada lado
Retirar
Añadir el caldo y las avellanas molidas
Remover
Añadir los lomos de merluza
Cancelar menú anterior
Menú Cocina 5 minutos
Tapa cerrada
Despresurizar manualmente
Rectificar de sal
Servir con una cama de salsa de avellanas
Colocar los lomos de merluza encima
Espolvorear con perejil
Receta adaptada de Directo al paladar