Y hoy vamos a asaltar el blog de Encarnita Fernández, "El paraíso de los golosos". Tengo que reconocer que soy muy golosa y me ha gustado mucho perderme entre tanta receta dulce, de las que he robado el Pastel de queso con rosas y gelatina de limón.
Me ha llamado la atención esta receta porque mezcla el arte con la gastronomía, es un plato inspirado en el cuadro de Dante Gabriel Rossetti.
Los ingredientes que necesitamos para cuatro personas son:
350 g de queso crema natural
450 ml de agua
1 sobre de gelatina de limón
pétalos de rosa
El sobre de gelatina que vamos utilizar es de 85 gramos.
Los pétalos de rosa que vamos a utilizar son del jardín de Alex, totalmente ecológicos por lo que se pueden comer sin problemas.
Preparación:
Como siempre, lo primero que hacemos es preparar los ingredientes y utensilios que vamos a necesitar.
A continuación preparamos la primera capa del pastel, para ello, vertemos en un cazo 150 ml de agua y lo llevamos a ebullición, una vez comience a hervir, retiramos del fuego y añadimos 60 gramos de gelatina. Mezclamos hasta que se disuelva y añadimos 150 ml más de agua. Mezclamos bien y dejamos enfriar unos minutos.
A la mezcla de gelatina vamos a ir añadiendo el queso crema, poco a poco, hasta que no tenga grumos y esté bien integrado.
Para que nos quede una mezcla cremosa y sin grumos, debemos de añadir el queso a la gelatina y no al revés.
Ponemos la mezcla en copas o vasitos, que hemos elegido, y dejamos reposar en la nevera mínimo dos horas para que cuajen.
Transcurrido este tiempo, preparamos la capa superior del pastel de queso, para ello, vertemos 75 ml de agua en un cazo, lo ponemos al fuego y llevamos a ebullición. Cuando empiece a hervir, retiramos del fuego y añadimos el resto de gelatina, mezclando bien para que se disuelva. A continuación, añadimos otros 75 ml de agua y volvemos a mezclar. Dejamos enfriar unos minutos.
Mientras que se enfría, deshojamos una rosa, lavamos y secamos los pétalos y reservamos. Sacamos las copas o vasos del frigorífico, colocamos unos pétalos de rosa y los cubrimos con la gelatina.
Volvemos a guardar en la nevera y dejamos cuajar durante un mínimo de 2 horas.
Presentación:
Este postre es tan bonito que no necesita nada más para decorarlo, así que, sacamos las copas de la nevera y lo servimos.
¿Habéis probado esta delicia? La cremosidad del queso, la frescura cítrica de la gelatina, y los aromas de los pétalos de rosa, hacen de este plato un postre suave y refrescante, ideal para estas fechas.
¡Bon appétit!