Una nueva y fácil receta de salmón con salsa de mostaza y miel y lascas de parmesano.
Uno de mis pescados favoritos es el salmón y en esta ocasión lo acompaño de una salsa de mostaza con miel y unas lascas de parmesano por encima ¡vale la pena probarlo!Esta receta de salmón es tan fácil que sólo hay que preparar la salsa de mostaza y miel y cocinar el salmón a la plancha. La salsa es tan increíblemente fácil de preparar que os llevará dos minutos. La podéis utilizar en multitud de preparaciones: ensaladas, filetes de pollo, hamburguesas, sándwiches….
¿Qué servir con el salmón a la plancha y la salsa de mostaza y miel? Pues unos maravillosos espárragos verdes, también preparados a la plancha.
¿Y el parmesano? Lo añadimos inmediatamente sacamos el salmón de la plancha para que con el calor se funda un poco y el salmón absorba su sabor. El Parmesano se utiliza muchísimo en platos de pasta o sopas pero también es un excelente queso de postre, especialmente cuando no está muy curado. En Italia, se sirve troceado y acompañado de higos o peras, o se parte en trocitos pequeños y se consume como aperitivo.
Es una de esas recetas de salmón que no puede ser más fácil de preparar y con la que impresionar a tus comensales.
Salmón con salsa de mostaza y miel y lascas de parmesano
Dificultad: fácil
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Ingredientes
1 filete de salmón de unos 125 gramos por persona
Sal y aceite de oliva virgen extra
Lascas de Parmesano
4-6 espárragos verdes por persona
Para la salsa
2 cucharadas de mayonesa (o 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra)
1 cucharada de mostaza a la Antigua: Este tipo de mostaza tiene una textura que a mí personalmente me gusta. Si no tenéis este tipo de mostaza podéis puede usar mostaza de Dijon en su lugar (pero no uséis mostaza amarilla en esta receta).
1 cucharada de miel
1 pizca de pimienta negra
1 cucharadita de eneldo
Preparación
Salsa
Introducid todos los ingredientes de la salsa en un bol pequeño. Mezclar bien con un tenedor. Usadla inmediatamente o guardadla en un recipiente hermético, como un bote de cristal con tapa, en el frigorífico. La podéis conservar en el frigorífico durante varias semanas. ¡Pero os la comeréis antes!
Salmón y espárragos
Espárragos: Limpiad bien los espárragos y cortad la parte dura con las manos. Los espárragos los ponéis en una sartén o una plancha que habréis untado con aceite de oliva virgen extra a fuego medio. Los tenéis que tostar un poco para que os queden crujientes. Les dais la vuelta procurando que se hagan por todos los lados. En cinco minutos estarán listos.
Salmón: Salpimentad los filetes y los cocináis en una sartén o en una plancha con una gota de aceite de oliva virgen extra también a fuego medio. Con tres o cuatro minutos deberán estar hechos. Procurad que estén bien hechos pero no pasados. Que no se os resequen. Cuando veáis que ya están los sacáis.
Servid el salmón en un plato sobre el que habréis puesto una cucharada de salsa. Echad unas lascas del parmesano y una pizca de eneldo seco sobre el salmón caliente para que se funda con el calor que desprende. Añadid los espárragos como guarnición.
Web: Commememucho
Lo que me gusta de esta salsa de miel y mostaza casera es que la podemos modificar a nuestro gusto. Si os gusta un toque ahumado ponedle media cucharadita de pimentón dulce. Si os gusta la salsa muy dulce, aumentad la cantidad de miel. Y para darle un toque picante adicional, podéis añadir una pizca de cayena ¡La salsa totalmente a vuestro gusto!