INGREDIENTES (2 personas)
2 envases de angulas sucedáneas (120 grs x2)
1 calabacín mediano
4 dientes de ajo
1 guindilla
2 huevos
Jamón serrano picado
Sal, pimienta y aceite de oliva
Tiempo: 15 minutos
Seguimos fieles con nuestras cenas a cámara rápida donde siempre hay poco tiempo y mucha hambre. Aquí os va una solución posible a tal problema cotidiano. Como hoy el tiempo se ha deprimido un poco, igual no es mala idea volver a tirar de platos calientes para ir a juego con el cielo. Esta opción es, como siempre, fácil y vertiginosa a más no poder. Una película de amor entre la Gula y el Calabacín que culminará en un emotivo final en vuestro paladar. Acercad la silla del director y dad las órdenes pertinentes. Silencio... se cocina. ¡Mandiles arriba!
1. Ponemos unas 2 cucharadas de aceite de oliva en el wok (o en una sartén) y doramos los dientes de ajo pelados y enteros junto a la guindilla. Los freímos hasta que cojan un bonito color dorado (no quemado) y los retiramos. Reservamos, que luego nos servirán para la decoración...
2. En ese mismo aceite aromatizado de ajo, salteamos los calabacines cortados en bastoncillos. Si usamos el wok vamos removiendo continuamente para que se sofrían ligeramente. Nos interesa que no se hagan demasiado y que mantengan cierto crujiente en boca. No diréis que no me expreso en modo culinario, ¿eh?
3. Incorporamos las angulas sucedáneas y las salteamos unos minutos junto al calabacín. Salpimentamos al gusto. Es decir, al vuestro.
4. Por otro lado freímos los huevos en una sartén con abundante aceite. Huelga decir que el punto de fritura del huevo es cosa vuestra (yemita más hecha, menos hecha, una puntita de pimentón...) Los sacamos quitando el mayor aceite posible.
5. En ese mismo aceite freímos unos segundos el jamón serrano bien troceado. Sacamos y reservamos.
6. Montaje de la película. En unos cuencos individuales vertemos nuestro salteado de angulas sucedáneas y calabacín. Colocamos encima el huevo frito y espolvoreamos el jamón alrededor. Terminamos coronando con los dientes de ajo fritos y la guindilla.
7. Cogemos un buen trozo de pan, cortamos el huevo en el plato y dejamos que la yema impregne al resto de personajes. Sencillo, ¿no? Pues no perdáis más tiempo leyendo.
¡Que aproveche, hitchcookianos!
¡No olvidéis comentar, con vuestra ayuda todo plato será mejor!
Fuente: este post proviene de The hitchcook, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Modificado:
