La receta original lleva champiñones y cebolla chalota, pero como no somos muy de setas y la cebolla no gusta a todos, las omití en la preparación del solomillo. Eso si, sin duda alguna con las chalotas tenía que estar tremendo, porque si así ya estaba riquísimo no me quiero ni imaginar si hubiese seguido un poco más la receta original...
La verdad es que se me ocurrió preparar esta receta porque tenia en casa los dos ingredientes principales, el solomillo y el hojaldre, y tenía ganas de probar algo diferente. ¿En casa lo habéis preparado alguna vez?
Vamos con la receta!
Ingredientes:
Solomillo
1 lata de paté
1 lámina de hojaldre
Huevo
Sal
PimientaElaboración
Empezaremos limpiando el solomillo, quitandole el exceso de grasa que podamos encontrarnos
En una sartén, con un poquito de aceite lo vamos a sellar para que nos quede más seco dentro del hojaldre y no se reblandezca la masa en el horno.
Extendemos la lámina de hojaldre
Untamos el paté por toda la lámina de hojaldre dejando un margen en los bordes para trabajar con más comodidad a la hora de cerrarlo
Ponemos el jamón serrano encima del paté cubriendo bien toda la superficie y colocaremos encima el solomillo que hemos sellado previamente en la sarten.
Cerramos envolviendo bien el solomillo con el jamón y después con el hojaldre, decoramos y pintamos con huevo para que se dore bien el hojaldre en el horno.
Metemos en el horno durante unos 40 min a 180º (precalentado) y cuando esté doradito por fuera lo sacamos.
Hay que tener cuidado para que no se nos quede demasiado hecho por dentro, y poco dorado por fuera, por lo que si veis que no se está dorando podéis poner únicamente el calor arriba en el horno para que de esta manera se termine de dorar el hojaldre.
Ahora ya solo nos queda emplatar y servir...
Bueno, y lo más importante...Disfrutar del plato!
¿Vosotros como preparáis el solomillo Wellington?
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Nos vemos el jueves con una nueva receta!!