Receta de Tarta de manzana con crema pastelera y masa quebrada. Con fotografías paso a paso.
Esta receta de la tarta o pastel, de manzana, con base de masa quebrada, no la encontraréis fácilmente por internet porque la mayoría son con hojaldre y en ésto radica la diferencia y exclusividad.
Es una elaboración muy sencilla, aunque os llevará un poco de tiempo porque son varias las preparaciones; como, hacer la base, -aunque ésta sea facilísima y rápida de elaborar-, la crema, cortar las manzanas, el almíbar, etc. y como todo esto es casero su sabor es insuperable.
Es preferible hacerla el día anterior porque tiene que servirse bien fría para que la crema pastelera esté consistente. Así mismo, podéis adelantar la crema el día anterior para que esté fría. También os explico cómo enfriarla rápido si se hace en el mismo momento.
La masa quebrada es muy fácil, se mezclan los ingredientes sin apenas amasarla pues no nos interesa que se desarrolle el gluten.
Con la cantidad que os indico en la receta, he cubierto la base de un molde de unos 30 centímetros de diámetro por 3 centímetros de alto. Si es más pequeño de 20/22 centímetros podéis hacer la mitad y usar una manzana menos.
Las manzanas reineta son muy adecuadas para la repostería pero podéis usar cualquiera que sea dulce, cuánto más grandes sean las manzanas más cubre y más bonitas quedan las láminas para la decoración. Intentar que las manzanas sean todas de un tamaño similar.
Ingredientes:
1º-crema pastelera:
Ingredientes y pasos para hacer la crema pastelera: pincha aquí.
3 yemas;
2 y 1/2 cucharadas de azúcar blanca.
1/2 litro de leche.
Un palito de canela en rama.
La peladura de un limón.
2º-la masa quebrada:
Para un molde de 30 centímetros (podéis hacer la mitad si el molde es de 20/22 centímetros).
4 manzanas grandes.
300g de harina de trigo todo uso.
150 g de azúcar blanca.
150g de mantequilla muy fría.
2 huevos pequeños talla "M". Para el almíbar de las manzanas:
100 gr de azúcar.
6 cucharadas de zumo de limón, que viene a ser un limón entero.
Brillo gelatinoso capa final (opcional):
12 g de harina de maíz o maizena.
100 g de azúcar blanca.
125ml de agua.
1 gotita de colorante alimenticio color naranja.
ELABORACIÓN:
Empezamos por la crema pastelera pues tiene que enfriar lo suficiente para que tenga consistencia y podamos poner la manzana encima.
Se puede preparar con antelación, el día anterior o por la mañana y hacer el resto por la tarde y si no es posible se mete en el congelador 15mn, pero cada 5mn lo removemos bien para que no se congele por algunas partes, solo es para que se enfríe rápido.
Pincha en este enlace para elaborarla paso a paso.
Masa quebrada:
Se puede hacer con una amasadora pero es muy sencilla y se hace muy rápido a mano.
Ponemos la harina sobre una tabla, hacemos un hueco en el medio y ponemos el azúcar y el huevo, encima de la harina ponemos la mantequilla bien fría y troceadita.
Con un cuchillo grande, (ya que si usásemos las manos calentaríamos la mantequilla), vamos cortando la masa y mezclando hasta conseguir pedacitos, es entonces cuando sí usamos las manos y amasamos sólo para conseguir unir y hacer una bola homogénea ya que no vamos a amasar más para que no desarrolle el gluten.
Se deja enfriar en la nevera unos 30mn, mientras preparamos el almíbar y las manzanas.
Almíbar:
Hacemos el almíbar antes de cortar las manzanas, que como sabéis, se oxidan enseguida y este almíbar les da sabor y las conserva.
Se pone un cazo con el zumo de limón y el azúcar, lo dejamos sin mover hasta que empiece a hervir y entonces lo dejamos unos 8mn, tiene que tener una textura pringosa pero líquida -no nos interesa que espese pues su función es bañar las manzanas-.
Utilizamos una fuente o plato grande y ponemos el almíbar.
Ahora pelamos y cortamos las manzanas con un cuchillo grande cebollero. Empezamos a cortar la manzana ya pelada, de arriba a abajo. Las descorazonamos quitándole las semillas.
Ponemos la manzana de pie y como si fuera el corte de una tarta se van haciendo láminas de unos dos o tres milímetros, es decir finas pero con consistencia. (Tener en cuenta que hay que montar unas encima de otras, si son muy gruesas quedará muy bruscas y además necesitaréis más manzana).
Las vamos poniendo en la fuente y las cubrimos con el almíbar, mientras cortamos las siguientes manzanas.
Sacamos de la nevera la masa y la colocamos en el molde previamente untado de mantequilla y harina para que no se pegue. Extender bien la masa y hacerle un borde, como de algo más de 1´5 centímetros, para poder poner la crema pastelera dentro y no se desborde teniendo en cuenta que encima hay que poner la manzana casi al borde de la masa.
Sacamos de la nevera la crema pastelera, la removemos bien intentando que no quede con demasiados grumos aunque al volver a calentarse en el horno se van a deshacer.
La ponemos encima de la masa y vamos extendiendo hasta cubrirla por completo hasta cerca del borde. Tiene que quedar bien nivelada la superficie para poder colocar las láminas de manzana.
Ahora vamos colocando la manzana encima de la crema. Empezamos por la parte exterior, sobreponiendo unas encima de otras por toda la circunferencia. Luego ponemos la siguiente línea y así hasta la del centro.
En este momento la metemos en el horno a 225ºC, 25mn, aproximadamente, calor arriba y abajo sin aire (=), ponemos la bandeja de horno en el nivel 2, empezando a contar por abajo. Es decir, un poco por debajo del medio del horno.
Sabremos que está lista cuando se empiecen a dorar las láminas de manera uniforme sin que se quemen demasiado.
Cuándo la saquéis del horno estará temblorosa porque la crema pastelera se queda un poco líquida por el calor. Al enfriarse se cuajará de nuevo y estará consistente.
La dejamos enfriar y cuando no eche humo, se mete en la nevera tapándola con film transparente o de aluminio y se deja enfriar por completo unas 4 horas.
Opcional:
Si queremos que tenga textura cremosa y más brillo en la superficie se prepara la siguiente elaboración:
Se pone la maizena en el agua fría y se mezcla bien, se pone en un cazo y añadimos el azúcar, removemos y se lleva a ebullición. Ahora ponemos una gotita de colorante naranja y removemos.
(La textura tiene que ser gelatinosa pero un poco fluida, si está muy espesa será difícil de extender y tapará lo bonito de las láminas. En este caso le añadimos más agua hasta conseguir la textura fluida).
Lo sacamos del fuego en un minutito y con un pincel vamos napando la manzana, es decir cubriendo las láminas de manzana, extendiéndolo bien por toda la superficie.
Le ponemos una guinda roja en el centro de la tarta, para decorarla. Os he puesto la foto de otra que hice con la guinda, pues la de esta entrada se me olvidó ponerla.....¡que pena!
Cubrimos la tarta con papel film transparente o de aluminio, lo dejamos en la nevera unas horas para que se enfríe, cuaje y se asiente bien.
¡A disfrutarla porque está tan buena que repetiréis seguro!
Con cariño.
Susana
Texto, fotografía y edición: Susana Rodríguez.
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