Seguro que el nombre de tarta mágica ha llamado tu atención. Y si te preguntas por qué, no te preocupes, que ahora lo sabrás. Esta tarta se llama tarta mágica de vainilla y fresas porque con una sola preparación se consiguen tres texturas diferentes. Anímate a probarla y verás qué rica.
Cantidad: 1 tarta (6 Raciones)
Tiempo de preparación: 15 minutos
Tiempo de cocción: 60 minutos
Lista en: 1 hora 15 minutos
Cocina: Internacional
Plato: Postre
Dificultad: Fácil Ingredientes:
200 gramos de fresas
1 vaina de vainilla
500 mililitros de leche entera
125 gramos de mantequilla
4 huevos (separados yemas y claras)
1 pizca de sal
150 gramos de azúcar
120 gramos de harina de repostería Instrucciones:
Lavamos bien y picamos las fresas en trocitos pequeños y los reservamos.
En un calentador ponemos la leche con las semillas y la vaina de vainilla a infusionar.
Una vez rompe el hervor separamos del fuego y reservamos.
Separamos las claras de las yemas de los huevos.
En un bol ponemos las yemas de los huevos y batimos las claras, ayudándonos de unas varillas eléctricas y una pizca de sal hasta punto de nieve y reservamos.
Al bol donde hayamos colocado las yemas le añadimos el azúcar...
... y batimos con varillas eléctricas hasta que emulsione bien y blanquee.
Derretimos la mantequilla con el microondas y la añadimos a la mezcla poco a poco sin dejar de batir.
A continuación vamos añadiendo la harina tamizada alternando con la leche templada infusionada...
... hasta que estén incorporadas, tanto la leche como la harina.
Añadimos las fresas troceadas ayudándonos de una lengua...
... y, por último, vamos añadiendo las claras, poco a poco,
con movimientos envolventes hasta que estén todas las claras integradas.
Precalentamos el horno a 200ºC y untamos un molde redondo de 24 centímetros bien con mantequilla, y en el fondo colocamos un papel de horno al cual también untaremos con mantequilla.
Metemos la mezcla en el molde y lo introducimos en el horno bajando la temperatura a 160ºC horneándolo durante 50 – 60 minutos observando que transcurrido este tiempo la parte de arriba quedará doradita.
Dejamos enfriar para meterla en la nevera un mínimo de 4 – 5 horas.
Desmoldamos y con mucho cuidado retiramos el papel de horno del fondo.
Al cortar la tarta observarás que tiene tres texturas diferentes con una base más dura en el fondo, una zona cremosa en el medio y por último un bizcocho doradito y riquísimo en la superficie.
La tarta mágica de vainilla y fresas está lista para comer bien fresquita.
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