Mi intención era hacer una tosta de salmón ó tosta noruega como también suele llamarse, pero dando el toque atascaburras. Para ello, en la crema de huevo, he incorporado un queso como el gorgonzola, el cual combina perfectamente con el salmón. Esta combinación le da un toque sorprendente y un sabor muy rico.
Para decorar he optado por una cobertura de pistachos. Esta cobertura le aporta una textura diferente, una gran combinación de sabor y una gran vistosidad al plato.
Después de leer todo esto, apetece verdad? Pues no te lo pienses y anímate a hacer esta receta. Es una receta sencillísima con la que sorprenderás a tus invitados.
Dicho esto… vamos al lío!!
Ingredientes para dos personas
Unos 150 gr de salmón ahumado
100 ml de nata (crema de leche) líquida para cocinar
2 huevos
Queso gorgonzola
1 pan de pita
Unos 50 gr de queso gorgonzola
Un buen puñado de pistachos
Pimienta negra
Aceite de oliva
Sal
Elaboración
Cascamos los dos huevos, batimos y echamos sal.
Incorporamos los huevos batidos a un cazo con un poco de aceite. El cazo lo tenemos al baño maría, para hacer la crema poco a poco.
Debemos ir removiendo constantemente con unas varillas para que no se cuaje el huevo. Incorporamos el queso gorgonzola, cortado a cuadritos, y acto seguido la nata (crema de leche) líquida.
Espolvoreamos con pimienta negra y seguimos batiendo, hasta que vemos como se va espesado la crema.
Cuando tengamos una textura compacta pero que se haya cuajado del todo, sacamos y reservamos.
Picamos los pistachos en trocitos pequeños.
Calentamos el pan de pita en tostador u horno. Una vez caliente, partimos por la mitad, y sacamos dos partes.
Ponemos la crema de huevo y queso gorgonzola sobre un pan de pita.
Cubrimos con el salmón ahumando.
Decoramos con los pistachos.
Echamos un chorrito de aceite de oliva por encima.
Con la tontería nos hemos marcado una receta de categoría!
A zampar!