Bizcocho Vegano Bajo en Hidratos
Hacía mucho que no os compartía una receta vegana y, si me sigues de hace tiempo, ya sabes que me gusta mucho probar con recetas de todo tipo y fomentar el consumo de productos vegetales porque, si nosotros reducimos un poquito nuestra ingesta de productos animales, estaremos contribuyendo por cuidar el medio ambiente y todo lo que ello conlleva.
Por supuesto, cada uno es libre de elegir la dieta que mejor se adapte a su estilo de vida y su manera de pensar. Por eso, aquí siempre podréis encontrar receta para todos.
Además de ser vegano, este bizcocho es bajo en hidratos, por lo que, si sigues una dieta ceto (baja en hidratos) o si los estás reduciendo por lo que sea, este bizcocho es una opción estupenda para disfrutar de un desayuno de 10 sin renunciar a nada.
Y pensarás, bizcocho vegano y bajo en hidratos ¿dónde está el truco? Pues el truco está en el ingrediente estrella ¡Nada más y nada menos que nuestra amiga la patata! Y es que, como ya he dicho otras veces, la patata tiene una mala fama que no es para nada verdad. La patata no engorda. Lo que influye, y mucho, es la manera de cocinarla, ya que no es lo mismo hacerla al vapor o al horno que con un litro de aceite.
Cocinada al vapor o al horno, la patata es uno de los alimentos más buenos que hay ya que nos aporta hidratos complejos de calidad, fibra, agua y potasio. Además de vitaminas y minerales a mansalva. Así que, vamos a dejar de demonizar a estos pobres tubérculos, para empezar a disfrutarlas como se merecen.
Si quieres algunas ideas sobre postres veganos, aquí te dejo unos vasitos de tiramisú y una gelatina de mantequilla de cacahuetes y cacao, que son estupendas.
Y sin más, vamos a ponernos manos a la obra con este bizcocho sin gota de harinas y ¡espectacular! Coge papel y boli y, ¡al lío!
Ingredientes (1 molde pequeño):
1 patata grande
¾ de vaso de leche vegetal sin azúcar (he usado de soja, pero usa la que más te guste)
3 cucharadas colmadas de mermelada sin azúcar (he utilizado de frutos rojos)
2 cucharaditas de postre de bicarbonato
1 vaina de vainilla
1 cucharadita de postre de stevia (ajustar cantidad si te gusta más dulce)
Opcional:
3 cucharadas soperas de proteína sabor vainilla (si eres vegano, proteína vegana)
10 gotas de saborizante chocolate blanco de MyProtein (tienes mi descuento aquí)
Procedimiento:
Lo primero que vamos a hacer es cocinar la patata, para ello la lavamos muy bien bajo el grifo.
La pinchamos un poquito con el cuchillo y la hacemos 5 minutos al microondas con la tapadera para que se haga al vapor.
Cuando al pincharla, esté blandita (que se migue fácilmente), la sacamos y esperamos un poco a que se enfríe.
Una vez esté fría, la pelamos y la machacamos con ayuda de un tenedor.
Añadimos la vaina de vainilla, la proteína y el saborizante (si optas por ellos), la leche, el bicarbonato y la stevia. Es decir, todos los ingredientes menos la mermelada.
Lo ponemos todo en el vaso de la batidora y, con cuidado, vamos batiendo todo hasta tener una masa homogénea y sin grumos.
Vertemos la mezcla en un molde de silicona o, en su defecto, un molde previamente engrasado con aceite de coco o aceite de oliva.
Con ayuda de una cuchara o una espátula vamos a hacer como una especie de hueco en el medio del bizcocho. Al hacerlo, tendremos cuidado de no llegar al fondo, es decir, que no se vea el fondo del molde.
Cuando tengamos el hueco, añadiremos la mermelada y volveremos a cubrir con la mezcla del bizcocho.
Este paso hay que hacerlo rápido ya que, aunque la mezcla no es muy líquida, al estar en crudo, el hueco se va a ir tapando. Tampoco va a quedar un hueco perfecto a la hora de volverlo a cubrir con la mezcla, ya que se mezclará todo un poco, pero no pasa nada, ya que eso le va a dar un toque bonito a la hora de cocinarlo.
Por último, metemos el molde en el horno previamente precalentado a 190ºC y dejamos durante unos 20-25 minutos.
Pasado ese tiempo, pinchamos con un palillo y, si sale limpio, lo sacamos y dejamos enfriar en una rejilla. Si aún sale manchado, dejamos unos minutos más y volvemos a comprobar hasta que salga limpio.
Como ves, es muy sencillo hacer este bizcocho apto para veganos, celiacos y dietas bajas en hidratos. Además, es una forma muy original de sorprender con una delicia fuera de lo común que además está tremenda.
¡Qué aproveche!