Las nueces de Brasil son un fruto seco, que se obtiene de un árbol silvestre localizado en el Amazonas.
Su nombre es debido a que, hasta hace pocos años, este era el país con mayor producción de este fruto seco, en el mundo; pero actualmente, es Bolivia, el país líder en exportación.
Destacan por sus propiedades antioxidantes, pues son muy ricas en nutrientes como: selenio.
Además, son un alimento muy energético y nutritivo, rico en proteínas y ácidos grasos solubles, por lo que es ideal para deportistas y/o para aquellos momentos en los que necesitemos un aporte extra de energía.
Contienen minerales, como el: calcio, fósforo, potasio, magnesio y hierro, y un alto contenido en vitamina C, B1, B2 y provitamina A.
También las podéis conocer por otros nombres, como: castaña Amazónica, Nuez de la Amazonía, Coquito de Brasil, árbol de la Castaña, Yuvia, Sapucaia, etc.
Los árboles en los que crecen, se pueden encontrar en Bolivia, Brasil, Perú y Colombia.
Como la mayor parte de los frutos secos, se pueden consumir crudos o bien, tostados.
No obstante, este fruto seco, contiene altos niveles en calorías y grasas; por eso, en numerosas ocasiones, son consideradas poco saludables. Sin embargo, tomándolas con moderación, nos pueden proporcionar números beneficios para nuestra salud, ya que son una fuente de proteínas y otros nutrientes esenciales.
Las nueces de Brasil, son especialmente indicadas para aquellas personas con una baja función tiroidea, ya que debido su fuente de selenio, elemento esencial para mantener la hormona tiroidea activa, el consumo de 3-4 nueces de Brasil al día, pueden satisfacer todas las necesidades de selenio, que requiere nuestro organismo.
El selenio, también es útil para desarrollar un sistema inmunológico más potente y ayudar a sanar heridas y prevenir la aparición de ciertos tumores, como: el de próstata, colon, estómago, pulmón y cáncer de mama.
En dosis bajas, reduce las enfermedades relacionadas con el corazón, pues ayuda en la activación de enzimas, que evitan que la sangres se coagule y forme trombos.
Contienen Omega-6, que reducen el riesgo de enfermedades cardiovasculares, grasas monoinsaturadas, y reducen el riesgo de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
Como veis este fruto seco, contiene muchos nutrientes, que nos ayudan a mantener una salud de hierro.
Fuente: este post proviene de La maleta de Maggie, donde puedes consultar el contenido original.
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