Esta receta ya la hemos publicado en otra ocasión, pero en este caso le vamos a dar unos giritos que si bien, mantiene la esencia de la receta en si y el sabor, le da aromas y un puntito diferente. Ni mejor no peor, diferente
Para 4 comensales:
400 g de fideos gordos
3 caballas deslomadas y a trozos
1,5-2 litros de caldo de pescado, de mejillón, verduras, algo así que tengáis o lo preparáis según receta: caldo de pescado
3 dientes de ajos pelados y laminados
2 pimientos verdes cortados pequeñitos
1 cebolla cortada pequeñita
3 ó 4 tomates sin piel y escurridos y rallados o cortados lo más pequeño posible
1 cucharadita de pimentón
1 copa de Manzanilla de Sanlúcar
Un ramillete de cilantro
3 ó 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
Cebollino picado
Sal y pimienta al gusto
1 hoja de laurel
Empezamos rehogando nuestros ajos en aceite de oliva caliente a fuego medio. Cuando empiecen a dar olor, ponemos la cebolla con un poco de sal para que suden y a los 3 ó 4 minutos los pimientos. Dejamos hasta que todo está tierno y finalmente el tomate. Ahora bajamos el fuego y seguimos a fuego lento.
Cuando empieza a perder todo el agua nuestro sofrito, le añadimos el pimentón, removemos y acto seguido el vino. Removemos y en un minuto, ponemos el caldo y el cilantro. Romperá a hervir y a los 2 ó 3 minutos, agregamos nuestros fideos y el laurel. El tiempo de cocción de los fideos gordos es de unos 11 minutos, así que salpimentamos y removemos de vez en cuando y listo.
Cuando están tiernos o casi tiernos los fideos, añadimos las caballas, removemos y apagamos. Tapamos y dejamos reposar un par de minutos. Decoramos con cebollino picado
La magia entró en mi cocina nuevamente. No puedo decir más que: seáis muy felices, o por lo menos intentadlo.