De hecho es uno de mis talones de Aquiles, que me gusta el dulce. Muero por una tarta de chocolate, por la crema pastelera, por el flan, la nata montada (crema de leche)... Ay, ay, ay, pero ¿vosotros habéis visto esta tarta de queso?
Las tartas de queso estilo New York son suaves y aterciopeladas, como una mousse. Os prometo que se derriten en la boca. Y la combinación con el caramelo salado es ¡¡simplemente perfecta!!
Os dejo con esta receta ma-ra-vi-llo-sa, que espero que hagáis y que me contéis qué os ha parecido. Recordad que a través de las redes sociales estoy a vuestra disposición para resolver cualquier duda que tengáis sobre las recetas, y estaría más que encantada de recibir vuestras fotos y vuestros comentarios. ¡¡Allí os espero!!
New York-Style Cheesecake {con Salsa de Caramelo Salado}
Ingredientes:
Para la base:
100 g de galletas.
30 g de mantequilla.
Para la crema de queso:
15 g de harina.
130 g de azúcar.
una pizca de sal
225 g de queso Philadelphia.
225 g de queso Mascarpone.
2 huevos.
1 cucharadita de extracto de vainilla.
200 ml de nata (crema de leche) líquida para montar {35% de mat. grasa}.
2 cucharaditas de zumo de limón.
Para la salsa de Caramelo Salado:
200 g de azúcar.
200 ml de nata (crema de leche) líquida para montar {35% de mat. grasa}.
2 cucharadas de agua.
20 g de mantequilla.
una pizca de sal Maldon, al gusto {se puede usar sal final normal}
Elaboración:
1. Para hacer la base, derretimos la mantequilla en el microondas y la mezclamos con las galletas trituradas. Yo las trituro en la Thermomix, unos segundos a máxima potencia, hasta que se han convertido en un polvo fino, pero podemos hacerlo con ayuda de una bolsa y un rodillo de amasar.
2. Distribuimos las galletas sobre la base de un molde desmontable, con el fondo cubierto con papel de horno y las paredes untadas de mantequilla. Presionamos bien con los dedos para hacer una base compacta. Forramos la parte exterior del molde con dos o tres capas de papel de aluminio, para asegurarnos de que no le va a entrar agua al ponerlo al baño María y reservamos en la nevera mientras preparamos la crema de la tarta. Encendemos el horno a 165ºC para que vaya calentando.
3. Batimos con ayuda de nuestras varillas el queso Philadelphia y Mascarpone hasta que estén suaves. Yo, con la Thermomix, pongo la mariposa y velocidad 3. Añadimos la harina, el azúcar y la sal y seguimos batiendo. Si utilizamos la Thermomix, conviene que nos fijemos que se incorpora todo bien y que a medio batir bajemos el queso que se queda adherido a las paredes del vaso con ayuda de una espátula.
4. Mezclamos la nata (crema de leche) con las dos cucharaditas de limón, removemos bien, y dejamos reposar un minutito. Veremos que se espesa, es completamente normal. De este modo hacemos lo que en muchas recetas llaman "sour cream", pero casero, ya que a veces no es fácil de encontrar.
5. Mientras, añadimos los huevos, uno a uno, mientras seguimos batiendo (en la Thermomix, velocidad 3), dejando que se incorpore bien un huevo antes de añadir el siguiente. Añadimos también el extracto de vainilla.
6. Seguidamente incorporamos la nata (crema de leche) con zumo de limón que habíamos reservado, batimos ligeramente hasta que se haya incorporado y vertemos sobre la base de galletas que teníamos reservado en la nevera.
7. Horneamos al baño María, con agua hasta aproximadamente la mitad del molde, durante 1 hora y cuarto. No debe estar completamente cuajada, sino un poquito blandita en el centro. Apagamos el horno y dejamos reposar allí, con la puerta entreabierta, hasta que se haya enfriado. Entonces, llevamos nuestra tarta a la nevera, está más rica de un día para otro.
8. Para hacer la salsa de caramelo salado, ponemos en un cazo a calentar la nata (crema de leche) con una pizca de sal, a nuestro gusto, más o menos salado. Cuando esté a punto de hervir, retiramos del fuego y reservamos.
9. En un cazo ponemos el azúcar con las dos cucharadas de agua, ponemos al fuego y dejamos que se forme el caramelo. Hay que tener cuidado de que no oscurezca demasiado para que no amargue. Cuando el caramelo esté listo, retiramos del fuego y le añadimos la mantequilla, con cuidado, porque burbujea bastante. Removemos y añadimos la nata (crema de leche), también con mucho cuidado.
10. Cocemos dos o tres minutos hasta que esté todo bien integrado, vertemos en un bote de cristal y dejamos enfriar. Igual que la tarta de queso, mejor de un día para otro.