La receta de pechugas de pollo que os muestro hoy es muy sencilla y fácil de hacer y eleva está pieza a un nivel más rico. La cobertura de hojaldre con el pesto entre el pollo y la masa le dan un sabor super rico y las pechugas de mantienen jugosas y tiernas como nunca antes! La receta la he sacado del último libro de Jamie Oliver, de 5 ingredientes y la verdad es que agradece cocinar con pocos elementos y que el resultado sea tan delicioso. Ahora podemos comprar el hojaldre con bastante facilidad y ya sabéis que el pesto es un básico de nuestra nevera. Merece mucho la pena hacer el tuyo propio, así que os dejo también el enlace de cómo hacerla. Los tomates al horno le dan a esta receta, el toque ácido que necesita. También lo he servido con una ensalada de rúcula, no se necesita nada más! En 25 minutos tendréis una comida deliciosa, fácil y con un toque especial que seguro les encanta a vuestros seres queridos.
INGREDIENTES (2 personas)
2 pechugas de 120 gr
2 cucharadas de pesto casero
200 gracias yo tomates cherry de rama
1 masa de hojaldre
rúcula
Lo primero de todo es precalentar el horno a 220 grados.
Damos unos golpes a la parte más gruesa de la pechuga, para aplazarla un poco.
Salpimentamos el pollo por ambos lados y le añadimos una cucharada de pesto por encima.
Cortamos el hojaldre en rectángulos de 4×10 cm más o menos y cubrimos las pechugas remontando un poco cada lámina de hojaldre.
Metemos los bordes debajo de la pechuga y pincelamos un poco con el aceite del pesto o aceite virgen extra las pechugas recubiertas de hojaldre.
Limpiamos bien los tomates, les añadimos un chorrito de aceite y sal. Los ponemos en otra fuente.
Horneamos las pechugas junto con los tomates durante 20 minutos y ya está listo.
Servimos con la rúcula aliñada y a disfrutar.
Espero que os guste!
GuardarGuardar
ha sido publicado originalmente en My CMS. Puedes seguirme también en Twitter y Facebook