Ingredientes:
1 cebolla y 1 puerro.
1 rama de apio y 1/4 de coliflor.
1/2 kg. de arroz redondo.
12 calamarines.
1 sobre de tinta de calamar.
aceite y jerez seco.
sal y pimienta.
queso pecorino y mantequilla.
caldo de pescado.
pan de perritos.
Empezamos por hacer el fondo del risotto poniendo la cebolla, los puerros y el apio, cortaditos para sofrito, en una sartén amplia con 3 cucharadas de aceite. Lo ponemos a fuego medio y, mientras tanto lavamos y troceamos en arbolitos pequeños la coliflor y cortamos los calamarines reservando entera la parte de los tentáculos.
Cuando las verduras del sofrito empiecen a perder la tersura añadimos la coliflor troceada en arbolitos pequeños y dejamos evolucionar a fuego medio durante 10 minutos más.
Es el momento de añadir los calamarines troceaditos, salpimentamos, subimos el fuego y le damos a todo junto unas vueltas durante 3 minutos más.
Sacamos de la sartén la mitad del contenido (lo añadiremos después). A lo que queda en la sartén le agregamos el arroz, la tinta de calamar y le damos a todo junto unas vueltas. Rociamos con un chorrito de jerez seco y seguimos moviendo continuamente el contenido de la sartén manteniendo el fuego medio-alto .
Cuando veamos que se ha evaporado el jerez, iremos añadiendo cazo a cazo el caldo que tendremos caliente y a punto. Removeremos continuamente y esperaremos a que se vaya absorbiendo cada cacito de caldo antes de añadir el siguiente. Este proceso durará unos 20-25 minutos. Es bueno ir probando el arroz para dejarlo con el punto de cocción y sazón que nos guste.
Cuando tengamos el arroz en el punto deseado añadimos una nuez de mantequilla, el queso pecorino rallado y esa mitad del sofrito que teníamos reservada. Dejamos que se integre y se caliente todo bien unos minutos y, mientras tanto, freímos en abundante aceite los tentáculos enharinados de los calamarines.
Cortamos los panes de perrito en forma de lápidas. De cada bollo de perrito salen 4 lápidas y los tostamos hasta obtener el color deseado.
Montamos los platos poniendo el risotto en medio y adornando con una lápida de pan de perrito en un extremo y unos tentáculos medio enterrados en el risotto de forma que parezca que están abriéndose camino desde dentro.
Podéis mejorar la presentación añadiendo una cruz o un R.I.P en las lápidas.
Feliz Halloween!