Para una persona necesitaremos:
1 filete de lomo de salmón.
1/4 de cebolla.
1 puñado de espinacas frescas.
2 o 3 cucharadas de queso cremoso Philadelphia o similar (podéis comprarlo light).
Sal y pimienta al gusto.
Primero vamos a trocear la cebolla y la pochamos. Picamos las espinacas y las añadimos a la cebolla. Cuando se vayan quedando tiernas añadimos el queso y removemos todo bien hasta que el queso se haga crema.
Salpimentamos el salmón y lo hacemos, bien a la plancha o al vapor (a mi personalmente me gusta más al vapor, desde que tengo mi cofre de Lékué no quiero otra cosa para hacer el pescado).
Cuando el salmón esté hecho a nuestro gusto le untamos por encima la mezcla que hemos creado de cebollita, queso y espinacas y a disfrutarlo. Ya veréis qué rico está. Como idea, si tenéis una cena, podéis partirlo en varios trozos y servirlo encima de una tosta como canapé caliente.