Esta tarta es un postre de indudable origen francés y que consiste fundamentalmente en preparar un un aro de bizcocho de soletilla y rellenarlo con una mousse o una crema de frutas.
Os dejo la receta para la elaboración de los bizcochos de soletilla, pero si os queréis ahorrar este paso, que no os lo recomiendo, porque se hacen muy rápido y el resultado es espectacular, podéis usar bizcochos de soletilla.
INGREDIENTES
Para los bizcochos
160 gr. azúcar
160 gr. harina
150 gr. claras de huevo
100 gr. de yema de huevo
60 gr. azúcar glas
Bavaroise de frambuesas
350 gr. de nata montada (crema de leche)
250 gr. de puré de frambuesas.
120 gr. azúcar
50 gr. agua
10 gr. gelatina (5 hojas)
Almíbar
75 gr. azúcar
75 gr. de agua
50 gr. de licor de frambuesas o ron
Coulis de frambuesas
150 gr de puré de frambuesas
20 gr. azúcar
4 gr. gelatina (2 hojas)
Decoración
250 gr. de frambuesas frescas
Azúcar glas
Pistachos verdes.
ELABORACIÓN
Vamos a empezar elaborando el bizcocho de soletilla, para ello vamos a montar las claras a punto de nieve, tienen que quedar duras, porque van a formar la estructura de nuestro bizcocho. Cuando estén a medio punto vamos incorporando, sin dejar de batir el azúcar, para que se integre bien sin que nos bajen. Batimos aparte las yemas y un truco para que sea mas fácil incorporarlas al merengue sin que se nos baje, es mezclar primero las yemas con un par de cucharadas del merengue, de esta forma igualamos texturas. Una vez incorporadas las yemas, es el momento de la harina, para ello la vamos a tamizar y la incorporaremos en 3 veces con la ayuda de una lengua y con movimientos envolventes.
Una vez lista la masa, la colocamos en una manga pastelera y sobre una plancha de silicona o un papel de horno, hacemos, por un lado bastones todos juntos de la altura que queramos preparar la tarta, y por otro tomando como medida el aro, que nos ayudara a montar la tarta, hacemos un circulo que sera nuestra base, lo espolvoreamos con azúcar glas y al horno, previamente caliente a 170º durante unos 15 min. Vigilar que no se pasen de cocción.
Ahora vamos con el almíbar, ponemos a calentar el agua con el azúcar hasta que todo el azúcar quede disuelto, incorporamos el licor elegido, si queremos quitar el alcohol lo dejamos hervir unos minutos y si nos apetece que tenga un puntillo, lo retiramos y dejamos enfriar.
Para la elaboración del bavaroise, empezamos poniendo a hidratar la gelatina en agua fría. Mientras esta se hidrata diluimos el azúcar en el agua y llevamos al fuego para que hierva unos segundos. Retiramos del fuego y añadimos la gelatina bien escurrida, movemos para que se integre perfectamente y añadimos el puré de frambuesas. Dejamos que se vaya enfriando la mezcla y mientras tanto vamos montando la nata (crema de leche) y cuando la mezcla de la fruta empiece a tener algo de cuerpo es el momento de mezclarlo con la nata (crema de leche).
Por último vamos a elaborar el Coulis. Ponemos a hidratar la gelatina en agua fría. Calentamos una parte del puré de frambuesas con el azúcar, cuando este bien diluido añadimos la gelatina escurrida. Mezclamos bien para que se integre y reservamos.
Y ahora con todo listo llega el momento del montaje. Colocamos con la ayuda de un aro, lo ideal uno de molde de tarta desmontable. En la base colocamos nuestro disco de bizcocho. La tira de bastones de bizcocho le vamos a recortar las puntas para que nos quede un rectángulo perfecto y lo colocamos, apollado sobre el aro y sobre el disco de bizcocho, a modo de pared. Las zonas doradas del bizcocho van hacia afuera y hacia abajo. Mojamos bien el bizcocho con el almíbar y rellenamos con el bavaroise, sin que llegue al borde superior. Lo metemos en la nevera o el congelador para que enfríe y solidifique. Una vez bien frío volcamos el coulis de frambuesa y volvemos a enfriar para que gelidifique. Y ya solo queda antes de presentarla decorarla con las frambuesas, los pistachos o el fruto seco que queráis en trocitos y espolvorear con azúcar glas. Y a disfrutar, que esta tarta se disfruta mucho.
«Todos te buscan».Marcos 1, 38