El sábado pasado fue el cumple de mi madre y organicé una comida en casa con algunos familiares en la que no falto la tarta.
En un principio quería hacer alguna tarta historiada, con varios pisos, frosting......Pero luego pensé que a mi madre le gustan las cosas sencillas, y sobre todo le gusta el queso y le gusta el membrillo.
Y así surgió la idea de ponerle la mermelada de membrillo que hice el otro día, a una tarta de queso.
Era la primera vez que hacía esta receta. Me arriesgue un poco, pero solo un poco, ya que la receta es de Sandra, de su libro Las recetas de la felicidad.Y con ella el riesgo es mínimo, todas sus recetas salen a la primera.
Ya sabéis que en casa nos gustan las tartas de queso a rabiar, y prueba de ello es que tengo varias recetas publicadas en el blog.
Esta receta nos ha gustado mucho. Tiene un sabor delicioso, es muy cremosa y lo mejor es lo rápido y sencilla que es su elaboración. No hace falta ser un as de la repostería para hacerla.
Aunque la mermelada de membrillo le va como anillo al dedo se puede cubrir con mermelada de mora, arándanos.... la que os guste. Yo desde luego me quedo con la cobertura de membrillo.
No dejéis de hacerla, absolutamente recomendable.
Os cuento como se hace...
Ingredientes:
Para la base:
150 gr de galletas
70 gr de mantequilla derretida
Para el relleno
600 gr de queso cremoso
400 gr de leche condensada
200 ml de nata (crema de leche)
Un sobre de preparado para flan ( yo use Flanin)
Para la cobertura
Mermelada de Membrillo y Café
Preparación:
Primero preparamos la base de la tarta. Para ello solo hay que triturar las galletas con la ayuda de un robot, yo lo hice con la thermomix, o simplemente metiendo las galletas en una bolsa y dándole unos golpes con el rodillo.
Derretir la mantequilla en el microondas durante unos 30 segundos.
Mezclar ambos ingredientes y cubrir toda la superficie de un molde desmontable de 23 cm, también sirve el típico de cheesecake de 20 cm, así os quedará mas altita.
Os podéis ayudar de la parte de atrás de una cuchara sopera para nivelar la base de galletas.
Introducir en el congelador para que se ponga dura.
Mientras tanto vamos a preparar el relleno de queso.
Verter todos los ingredientes en una cazo a fuego lento e ir removiendo con la ayuda de unas varillas de mano hasta que se haya disuelto el preparado para flan y esté libre de grumos. Veras como la crema va espesando.
Retirar el cazo del fuego, sacar la base de galletas del congelador y volcar la mezcla de queso sobre la base de galletas. Dejar que atemperé en la encimera y pasar al frigorífico para que terminé de cuajar.
Aunque en 6 horas estará lista yo os recomiendo que la dejéis más tiempo. Lo ideal es hacerla el día de antes, como todas las tartas de queso mejora con los días. Yo la deje más de 24 horas en el frigo y estaba exquisita.
Desmoldar y cubrir con la Mermelada de membrillo.
La combinación es una delicia, os lo aseguro.
Está diciendo.... ¡¡Comeme!!
Espero que os animéis a prepararla, merece la pena, no os arrepentiréis...
Nos vemos el domingo con una nueva receta.
Que paséis un feliz fin de semana.