Lo mejor de este postre es que sabe exactamente como esperas que sepa… un poco a fresa, un poco a pastel de queso y en su conjunto tiene un sabor delicioso. Y todavía mejor, se puede preparar en 15 minutos (¡no bromeo!). No se amasa. No hay tiempo de espera. Un precioso y vistoso postre en un plis-plas y a otra cosa mariposa.
Qué necesitamos para unos 6 vasos:
3 o 4 fresas por vaso
Azucar
1 tarrina Queso Philadelphia
Esencia de vainilla
1 Yogurt
Galletas María
Cómo prepararlo:
De hecho, cortar las fresas es la parte más larga del proceso. Después de cortarlas, se prepara un super rápido preparado de “pastel de queso” para nuestro “parfait”.
Utilizaremos crema de queso, tipo Philadelphia, yogurt, un poco de azucar y esencia de vainilla: mezclamos bien estos ingredientes hasta que consigamos una crema suave y …. mágicamente obtendremos una sensación de sabor escandalosamente similar al del pastel de queso.
Ahora cogemos unos vasos o unas copas bonitos, picamos unas galletas María y arreglamos las capas en los vasos como más nos guste, alternando la pasta de las galletas picadas, el queso y las fresas. Encima podemos poner un par de fresitas cortadas de adorno.
Ahora podéis hacer lo que queráis: comerlo inmediatamente o guardarlo en el refrigerador para más tarde, según os guste más o menos frío.
Ya os he dicho que soy muy mala en repostería pero con esto … ¡me atrevo!
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