Se acabaron los llantos cuando preparas el sofrito. Aquí tienes una selección de buenos trucos para cortar cebolla sin llorar.
Antes de nada, debes saber que la causante del lagrimeo cuando se corta cebolla es la alinasa, una sustancia presente en en la cebolla que libera una molécula irritante para los ojos (el propanotial), aunque se absorbe por la nariz. Los trucos consistirán en evitar al máximo el contacto de nuestra nariz con la alinasa o que la liberación de la sustancia sea menor.
Usa un buen cuchillo bien afilado. Cuanto más limpio sea el corte, menor será la liberación de gases.
Aparta la cebolla de la cara al máximo. Cuanto más lejos la mantengas mientras la pelas, más lejos estarán los gases y con ello su efecto será menor.
Intenta que la cebolla esté muy fría. Es bueno guardarlas en la nevera, así el gas es menos volátil y se libera menos cantidad. También la puedes meter unos minutos en el congelador antes de cortarla
Aunque es un poco aparatoso, si picas la cebolla sumergida en agua también evitarás el lagrimeo y la liberación de gases.
Moja la hoja del cuchillo en agua o vinagre para neutralizar el efecto de los gases.
Enciende una vela que absorba los gases y pela la cebolla debajo del extractor de humos.
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