Después de los últimos chascos que me he llevado, creo que voy a darme un descanso en esto de buscar novia...
Hoy me he obligado a dejar el sofá, que estaba un poco depre y pasándome de rosca .
¡Que idealizado tiene el personal el bosque de los cuentos! Todo tan bucólico, con sus flores y sus pajaritos...
Por eso a la gente le sorprende el vicio que hay aquí. Pero la verdad es que cómo en todas las comunidades aparentemente idílicas ¡Telita lo que hay detrás!
No voy a cotillear los líos de nadie, pero si os contase...
Claro que esto, a palo seco, es un tostón. Aquí la oferta cultural es cuanto menos escasita y la vida nocturna inexistente.
He pensado hacerle una visita a un colega. Pedrito es el pastor, al chaval le viene de familia este curro tan frustrante sin vacaciones ni puentes ni na, así que muchas noches paso a hacerle una visita porque se aburre como una ostra y le da por gastar bromitas de esas de "Que viene el lobo, que viene el lobo!" que le han dado tantos problemas... este año al pobre en las fiestas ni le han dejado jugar el partido de solteros contra casados.
No creáis que es un gañán sin conversación, aunque esta echado al monte con lo de internet está a la última, además el tío no lee, devora. Y hacemos una especie de club del libro que es también una excusa para pegarnos un hartón de lo que cuadre. Así tenemos los dos la sensación de que tenemos algo de vida social interesante.
Ahora estamos con las novelas gráficas. ¡Menuda calidad hay por ahí! Hoy le devuelvo lo último que me ha dejado, Píldoras Azules de Frederik Peeters . Me ha emocionado, es una historia de amor a ratos durísima y otros muy emotiva , pero contada sin artificios, honesta... y que decir del dibujo, ¡magistral! Ha acertado de lleno al recomendarmela.
A veces nos liamos unos cigarritos de la risa y no se si por el hambre que nos dá, no he comido muchas cosas que sepan tan riquísimas en el campo como su pastel de pastor.
La receta es una especie de pork pie al estilo Pedrito, o sea rústico que te mueres, pero el resultado es delicioso.
Empanada de pastor (Para molde de 24 cm)
Para la masa
150 gr de harina de fuerza
1 sobre de levadura
1 c.t. de sal
1c.s.de aceite de oliva
Para el relleno
225 gr de carne picada
75 ml. de vino blanco
1/2 c.t. de jengibre
110 gr de mozzarella
1 huevo
110 gr de ricotta o requesón
100 gr de pimientos asados en tiras, bien escurridos y secos
Mezclar los ingredientes secos en un bol y añadir 90 ml de agua caliente del grifo y el aceite, removiendo con una cuchara de palo hasta que la masa se separe de las paredes.
Amasar 5 min sobre una superficie enharinada. Formar una bola y taparla con film. Reposar 15 min.
Sofreír la carne en una sartén, añadir el jengibre y cuando esté añadir el vino blanco y dejar reducir a fuego alto.
En un bol mezclar el queso ricotta con la yema. Precalentar el horno a 220º
Extender con el rodillo 3/5 partes de la masa y colocarla en el molde de manera que los bordes cuelguen unos 3 cm. Espolvorear la mitad de la mozzarella sobre el fondo y encima extender la mitad de la carne, sobre esta los pimientos y la mezcla de ricotta. seguir con el resto de la carne y acabar con la mozarella.
Estirar el resto de la masa en un disco 1 cm. mayor que el molde y cubrir la empanada. Pellizcar ambos bordes juntos para sellarlos y enroscar para dentro apretando. Hacer pequeñas hendiduras con un cuchillo y pincelar con la clara.
Con los recortes hacer hojas, flores o lo que se nos ocurra, pegarlas sobre la empanada y pincelar también.
Hornear 15 min. en la parte media-baja del horno. Después cubrir con un papel de aluminio holgado, y dejarla 10 min. mas.
Pasar en una rejilla. Se puede comer caliente o a temperatura ambiente.