Bizcocho de naranja al aroma de cardamomo

Una de las cosas que llevo mal de vivir en EEUU es el precio de la fruta y la verdura. Bueno, para ser justa solo de algunas frutas y verduras porque otras están muy bien de precio. Mientras que en España cada minúscula cajita de arándanos te la venden como si contuviera zafiros, aquí te dan medio kilo por 3 dólares cuando están en plena temporada. O las limas, te dan 10 por $1. Pero lo de las naranjas no lo puedo entender. Son carisísimas y de California que, me van a perdonar los californianos de S. Diego a Sillicon Valley pasando por Beverly Hills, pero no tienen nada que hacer contra las de Valencia. Esto ultimo no lo voy a traducir.
  When coming to live in the US from a different country you have to change a lot of things in your life. It is all about adapting to the new reality, which includes adapting to the new grocery shopping reality. Back in Spain I would have never been able to enjoy blueberries at the reasonable price they have here. But what is tearing me apart is having to give up my oranges. My gorgeous sweet delicious Valencia oranges at 0.89Eur/kg. It makes me homesickjust to think about it.

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Todo es adaptarse. En realidad cambiarse de país es un asunto de adaptación permanente. Y en este caso hablamos de adaptarse a la nueva realidad de la compra del súper. Que las mazorcas de maíz están a 10 por $1? Pues se aprende a apreciar la mazorca. Que los pimientos rojos están a $1.30 la unidad? pues que viva el pimiento verde. Que hay 200 variedades distintas de patatas? Pues a probar una cada semana hasta que hemos dado con la que más nos gusta. Lo bueno es que uno de pronto tiene la oportunidad de probar un montón de cosas nuevas que, o no están disponibles en nuestros mercados de España, o lo están como productos muy especiales y muy caros.

A cambio, hay que aprender a decir adiós a productos que para mí eran muy cotidianos pero que aquí no están a mi alcance bien porque no se encuentran o porque los precios son prohibitivos. El pan por ejemplo. El pan aquí con un clima que tiene días de un 80% de humedad no ha tenido una corteza crujiente jamás. Y además no tienen picos. Así que comemos pan bimbo tostado o simplemente no comemos pan, que nos viene estupendo para la línea.

Otra renuncia grande ha sido el Rioja. No hay Rioja decente a precio decente. Hay poco (mal muy mal al consejo regulador o al ministerio de agricultura o a quién leches se tenga que encargar de exportar esto) y no es muy allá. Y cuando uno encuentra una bodega que puede resultar medio buena, el precio no merece el riesgo. Así que nos hemos pasado a los vinos de California que hemos descubierto algunos que nos gustan bastante.
Pero a lo que no he sido capaz de renunciar es a mis naranjitas. No puedo estar sin nuestro zumo. A veces lo compro ya recién exprimido que sale incluso más barato que comprar las naranjas. Es natural igual y lo exprimen allí pero no sé qué misterio hay alrededor de las naranjas enteras que son carísimas siempre. No he conseguido descubrir el secreto. Me dan ganas de guardar las cáscaras porque parece que es donde se va el dinero. La parte buena es que, ya que no son naranjas valencianas, al menos tienen muchas variedades distintas y hemos probado de muchos tipos.



Este mes en el Asaltablogs hemos tenido el gusto de pasar por la cocina de Healthy and Tasty. Muchísimas recetas llamaron mi atención pero elegí esta receta de bizcocho de naranja porque me acordé de que llevaba unos días sin comprar mis naranjitas queridas y me pareció una ocasión estupenda para ir a ver cómo andaban de precio. No las encontré muy mal, a $1.00 cada dos naranjas pequeñas... Me traje también un montón de menta por $0.50, eso también lo tengo que decir. Y un bote de cardamomo ya molido que tiene un aroma cada vez que lo abro que es una locura y que me costó muy barato también comparado con el precio que tiene el cardamomo en España (sin moler).
Así que con mis naranjitas, mi cardamomo y mi menta he versionado el bizcocho de Healthy and Tasty. La parte de la menta es sobre todo decorativa, pero el bizcocho en sí de naranja y cardamomo es un habitual en mi casa. Nos gusta mucho a todos y es tan aromático! Os animo a probarlo. El glaseado que le he puesto esta vez añade cantidades industriales de azúcar y calorías. Normalmente no se lo pongo y está igual de rico, pero esta vez quería ponerlo un poco "de fiesta".
Ingredientes

230 grs de azúcar

ralladura de 1 naranja

2 huevos grandes

50 ml de aceite de oliva virgen extra y 50 ml de aceite de girasol (para que no sea tan intenso el aroma del AOVE y se note el cardamomo)

1 cucharadita de cardamomo molido. Si no tienes molido hay que abrir las vainas, sacar las semillitas y machacarlas con un mortero. No se tarda nada.

230 grs de harina

2 cucharaditas levadura en polvo (Royal)

zumo recién exprimido de 2 naranjas medianas

200 grs de azúcar glas

2 cucharaditas de zumo de naranja

2 hojitas de menta y rodajitas de naranja para decorar
Instrucciones
Precalienta el horno a 180ºC y engrasa el molde que vayas a utilizar.

Mezcla en un bol el azúcar con la ralladura de naranja y frota con los dedos para aromatizar bien el azúcar.

Añade los huevos y bate bien con las varillas hasta que la mezcla esté espumosa. Añade después los dos tipos de aceite y el cardamomo y vuelve a batir bien.

Ahora tamiza la harina junto con la levadura y añádela en dos veces alternando con el zumo de naranja. Es decir, echa la mitad de la mezcla de harina y levadura, bate, echa el zumo, bate, y termina con la segunda mitad de la mezcla de harina y levadura. Bate hasta que no haya grumos.

Hornea durante unos 35-40 min o hasta que al insertar un palillo salga limpio. Ya sabes que cada horno va a lo suyo. Mi bizcocho de estas fotos tardó exactamente 35 minutos en estar listo. Sacamos del horno, esperamos un poco para desmoldar y dejamos enfriar del todo en una rejilla.

Cuando esté frío, mezclamos el azúcar glas con las cucharaditas de zumo hasta que tengamos una pasta bastante espesa. Para conseguir la consistencia deseada es sólo cuestión de añadir azúcar glas o líquido hasta tenerla. Extendemos por encima de la tarta y decoramos con la naranja y la menta.



Ingredients  

1 + 3 tbsp white sugar

Zest of 1 orange

2 Large eggs

1/4 cup extravirgin olive oil + 1/4 cup unflower or canola oil

1 tsp ground cardamom

1 3/4 cup all purpose flour

2 tsp baking powder

Juice of 2 medium sized oranges

1 cup powdered sugar

2 tsp orange juice

mint leaves and orange slices to decorate  

Directions

Preheat oven to 350ºF and grease pan

In a mixing bowl combine sugar and orange zest. Rub zest into sugar to release oils and aroma.

Add eggs and whisk on high speed until foamy. Then add oils and cardamom and mix well.

Shift flour and baking powder and add to mixture in two additions alternating with orange juice.

Pour into baking pan and bake for 30-35 min or until a toothpick inserted in the center of the cake comes out clean. Mine took exactly 35 min to be ready.

Let cool slightly and remove from pan. Let cool completely.

Now you can glaze it. Combine powdered sugar and juice until you get a paste that you can spread on top of the cake. Adjust consistency by adding more sugar or more liquid as needed.

Decorate with mint leaves and orange slices. Enjoy!

Bueno, puede que después de todo vaya a encontrar la forma de dejar de comer naranjas. Se me van a indigestar!