En 2006, (hace ya 10 años, que se dice pronto), tuve la oportunidad de probar la comida cajún y criolla en Louisiana, durante el roadtrip por el sudeste de los Estados Unidos que hice junto a mi querida hermana.
Fue en Nueva Orleans donde probamos la comida cajún por primera vez, pollo y gambas cocinadas con la Santísima Trinidad y la típica mezcla de especias cajún. Ambas recordamos esa comida como uno de los grandes momentos culinarios del viaje. (Sobre todo teniendo en cuenta que la mayor parte de nuestras comidas eran un sándwich de Spam y una lata de cerveza).
La cocina cajun es una cocina rústica y simple,de sabores fuertes y muy aromáticos que se estableció en la región de Louisana, y que trajeron consigo los desplazados franco-canadienses tras la incorporación de los territorios franceses en Canadá a la Corona Británica. Esta cocina se mezcló con la de los esclavos de origen africano de los territorios del sur de Estados Unidos, dando lugar a las cocinas cajún y criollas.
Por eso cuando, después de mucho buscar, vi que en el blog asaltado de este mes para el #Asaltablogs, Healthy and Tasty, M. Ángeles proponía esta receta entre las muchas que se pueden encontrar en su recetario, me decidí a traerme al blog un recuerdo de aquel viaje.
¡Y la verdad es que estoy muy contenta de haberlo hecho! Qué cosa más rica y sencilla para una cena, o como acompañamiento de cualquier otro plato.
Mi versión es un poco diferente a la de M. Ángeles, pues ya sabéis que yo soy un poco anti-microondas, y he decidido hacerlas al horno, y después de ver el espectacular resultado, ¡creo que las volveré a hacer así! Por supuesto, tarda el doble que en el micro, ¡pero con lo crujientitas y deliciosas que quedan merece la pena!
Ingredientes: (para 2 personas)
5 patatas pequeñas de piel fina
1 y 1/2 cucharaditas de pimentón dulce
1 cucharadita de orégano seco
1 cucharadita de albahaca seca
1/2 cucharadita de ajo en polvo
1/2 cucharadita de cebolla seca
1/3 cucharadita de pimienta blanca
1/3 cucharadita de pimienta negra
1/4 cucharadita de pimentón picante
1/4 cucharadita de comino en polvo
aceite de oliva
Elaboración:
En primer lugar lavamos las patatas bajo el grifo para asegurarnos que no queda nada de tierra adherida a la piel.
Las cortamos en cuartos y luego en gajos. Hemos de procurar que queden todas de aproximadamente el mismo grosor, para que se hagan por igual en el horno. Salamos las patatas ligeramente y mezclamos.
En un cuenco ponemos todas las especias, y añadimos aceite de oliva al gusto hasta conseguir una salsa densa. Mezclamos muy bien para homogeneizar.
Incorporamos las patatas al cuenco y mezclamos muy bien hasta que todas los gajos de patata queden bien impregnados con la mezcla de especias.
A continuación, ponemos las patatas en una bandeja de horno, sobre papel de hornear, o silicona y cocinamos durante 30- 35 minutos en el horno que previamente habremos precalentado a 190ºC.
Pasado este tiempo las sacamos y las disponemos en los cuencos donde las vayamos a servir.
¡Y ya tenemos listas nuestras patatas cajún al horno! Podemos acompañarlas de alguna salsa, o comerlas tal cual salen del horno. ¡Están buenísimas de todas maneras!
En realidad como veis el tiempo de preparación es mínimo (cortar las patatas y mezclar las especias) y la media hora de horno la podemos aprovechar para seguir haciendo cosas mientras se hace la cena sola.
Espero que os guste mi versión de las patatas cajún de Healthy and Tasty para el #Asaltablogs.
¡Que aproveche, Calderer@s!
Tagged: America, cajun,