Antes de empezar, lo aviso desde ahora, si no te gusta el picante y tienes ganas de recetas vas tener que espera una semana más ya que la receta de hoy es sólo apta para fans del picante, y cuando digo picante, digo de ese que te ponen varias cayenas en el bote, que es como de define el nivel de picante de un producto. Me refiero a esa sensación que te deja un alimento en la boca, que poco a poco te va calentando a medida que sigues comiendo.
En casa somos así, si no pica, no mola. Hasta Naia está ya desarrollando cierta tolerancia a este tipo de aditivo del que procuramos no abusar cuando come ella pero que es al final inevitable.
Nuestros platos en casa tienen siempre esa chispa que da una cayena o unas gotitas de tabasco. Ahora mismo puedo contar en casa contando el mejunje de hoy, seis tipos de este tipo de condimento contando desde guindillas hasta piri piris varios.
La receta de hoy es mi variación un poco a la vasca de un producto que compramos hace tiempo en unas vacaciones en Portugal. Digo a la vasca porque a falta de los ingredientes autóctonos portugueses los he sustituido por otros de aquí.
Me preguntareis para que podéis usar esto. Se puede untar un poco en tu base de sándwich o de burrito. Mezcla una pizca con mahonesa o yogur para crear una salsa con un poco más de alegría. También puedes añadirlo a tu salsa de tomate habitual.
Para la presentación de hoy he batido bien un poco de queso en crema y le he añadido una pizca del piri piri para merendarme un montadito súper rico y sanote.
INGREDIENTES:
Guindillas
Cayenas
Jalapeños
Zumo de media lima
Vinagre
Sal
Picamos bien, bien, todos los ingredientes, muy chiquitito, si tienes picadora, no lo dudes y úsala. Al final he incorporado jalapeños que me encontré sin querer en un conocido supermercado con una marca blanca muy deseada, por lo menos por los Bilbados, que hasta hace poco no ha sido implantado.
Ponemos en un bote y añadimos mitad de zumo, mitad de vinagre y sal. Una vez hecho en la nevera se va a conservar muy bien y además poco a poco va ir cogiendo un sabor mucho más potente.
FOTOGRAFIA TCV