Otra semana mas... ya estamos en marzo y comienza a vislumbrarse la primavera, ¡que ganas!.En Madrid hoy ha hecho un día tan bonito, que por un momento se me ha olvidado que vivo rodeada de asfalto y casi he podido sentir en el aire, los aromas renovados y alegres que nos ha traído éste final de invierno.
Pero volviendo a la receta de hoy, las mantecadas de Astorga tienen para mi un marcado aire nostálgico, y he querido con ella homenajear de alguna manera a mi madre, aunque nos dejo hace unos meses, permanece constante en el recuerdo de todos los que la queríamos.
Pero a lo que iba... mi familia materna procede de una pequeña villa perteneciente a la comarca de la Maragatería, mas en concreto a Turienzo de los Caballeros, precioso lugar donde transcurrieron muchos veranos tanto de mi niñez como de la de mis hijos, donde las mantecadas de Astorga junto con un chocolate caliente era la mejor de las meriendas.
Por eso éste era una asignatura pendiente para mi, he investigado aquí y allá para dar con la receta que me recordara al sabor de aquellas de mi infancia, pero debo reconocer que aunque ricas, no son lo que tenía en mi memoria, están a mitad entre mis recuerdos y los sobaos.
Uno de los ingredientes principales es la manteca de vaca, como en Madrid es muy difícil de conseguir, he optado por clarificar la mantequilla, para ello la he puesto al baño Maria, he retirado la espuma de la superficie hasta ver que no había ningún resto sólido. La he apartado del fuego y la he dejado reposar unos minutos. Pasado éste tiempo he colado con una gasa teniendo cuidado que no cayese ningún resto del fondo. Hay que tener en cuenta que hay que utilizar una mayor cantidad de mantequilla ya que al eliminar la partes sólidas, la cantidad clarificada es menor.
Aunque se pueden utilizar las cápsulas de magdalenas, yo he preferido hacer éstas cajas con papel vegetal para ajustarme un poco mas a la receta original, si os decantáis por ésta opción en internet encontráis mas de un tutorial.
MANTECADAS DE ASTORGA
Ingredientes:
6 Huevos
250 g. Azúcar
250 Harina
250 g. Manteca de vaca o mantequilla clarificada
1 Cucharadita de canela
1 Sobre levadura
Moldes de papel
Elaboración:
En un bol ponemos la mantequilla con el azúcar y batimos con varillas eléctricas durante unos minutos, hasta que veamos que la mezcla blanquea y se esponja. Añadimos entonces los huevos uno a uno mientras seguimos batiendo.
Mezclamos la harina con la levadura y la canela y tamizamos. Agregamos sobre la mezcla de mantequilla, azúcar y huevos y revolvemos con movimientos envolventes de abajo hacia arriba y al centro, hasta conseguir una masa homogénea.
Llenamos los moldes hasta las tres cuartas partes, ya que la masa crecerá un poco en el horno. Espolvoreamos un poco de azúcar en el centro y horneamos a 180º durante 10 minutos aproximadamente. Sacamos y dejamos enfriar en una rejilla.