Podría haber llamado a este plato “Quinoa Buddha bowl” para seguir la corriente de una de las últimas tontás a la que nos hemos unido tras los “smoothie bowls” (los cuales ya desmitifiqué en este artículo contándote que no eran más que batidos en boles… lo siento, así de duro )
Hoy te traigo una receta muy básica pero muy deliciosa para contarte que los Buddha Bowls (boles llenos de diferentes comidas sencillas y saludables que se asemejan a la redonda barriga de Buddah) son meros platos combinados en un bol… lo vuelvo a sentir, le he quitado todo el glamour, o no, depende de cómo lo mires:
¿Te imaginas a Manolo llegando al bar del pueblo pidiendo un Buddha bowl de los montes con su chorizo, su morcilla, su heuvo campero y sus papas fritas?
Ese es el tipo de prueba que he empezado a hacerle a las nuevas modas culinarias antes de dejarme llevar por mis ansias de bloguera. No te prometo que siempre lo consiga, porque bien que me dejo llevar por los chia puddings, pero oye, lo intento…
En fin, que hoy te traigo la receta de esta quinoa con verduras y te comparto una idea para que te hagas un buen
INGREDIENTES PARA LA QUINOA CON VERDURAS
½ vaso de quinoa de cultivo ecológico ( yo he utilizado la de El Granero Integral)
1 vaso de agua
1 cebolla
1 pimiento
1 berenjena
1 calabacín
1 cuchara sopera de tamari
2 hojas de laurel
2 dientes de ajo
½ cucharita de orégano
Un poco de aceite de oliva virgen extra
Sal ecológica al gusto
PROCEDIMIENTO:
Lava las verduras. Corta la berenjena en taquitos, añade sal y déjala reposando sobre un colador. Esto hará que se haga mejor y no amargue.
Lava bien la quinoa y cuécela con una hoja de laurel y el agua. En cuanto rompa a hervir, añade sal. Si te gusta que quede suelta, deja la olla destapada.
En una sartén, echa un poco de aceite y añade el pimiento picado. Saltea un par de minutos y añade la cebolla y el ajo picados con sal, la otra hoja de laurel y orégano.
Cuando esté todo bien pochado, añade la berenjena y saltea a fuego medio-alto durante un par de minutos. Baja el fuego y tapa. Remueve de vez en cuando.
Cuando la berenjena esté pochada, saca todo a un plato y reserva.
Añade un poco más de aceite a la sartén y añade el calabacín troceado. Saltéalo a fuego medio-alto hasta que se dore un poco, después vuelve a añadir el resto de los ingredientes. Remueve y sofríe a fuego lento durante unos minutos.
Cuando la quinoa esté lista, añádela a la sartén, remueve y rocía todo con tamari. ¡Listo!
Como ves en la primera foto, yo la he acompañado de hojas verdes, tomate, hummus y 1/4 de aguacate.
Fácil ¿no?
Ea, pues a disfrutar de este plato que está riquísimo y a vacilar por redes sociales
Y recuerda…
Las recetas están para cambiarlas
Nos leemos en un par de días, ya tengo el post con el guiso vegano de otoño casi listo
Un abrazo enorme,