Sopa Castellana
Ayer fue el lunes de aguas en Castilla y León. Tradicionalmente, ese lunes, la gente en Salamanca baja al río y comen hornazo.
El hornazo es un tipo de empanada, aunque la miga es bastante más gordita y está relleno de chorizo, aunque se pueden encontrar variantes con lomo o huevo cocido también.
Este año no tenía hornazo y, creo que es el primer año en el que no puedo comer este plato tan de allí para celebrar el lunes de aguas y sentirme cerca de mi otra tierra aún estando lejos.
Sin embargo, como guiño, os quiero compartir otra receta muy tradicional de la cocina Castellana y que me recuerda muchísimo a mi infacia y a mi yaya.
La sopa castellana es un plato sencillísimo y está tremendo a la vez. Con ingredientes que normalmente tenemos siempre por casa y que te soluciona una comida o una cena en un periquete. Suele utilizarse pan del día anterior, ya que con el caldo se ablanda y queda tremendo.
Si no has probado este plato, te lo recomiendo porque seguro que te encanta.
Si quieres una opción de sopa vegana, te dejo el enlace a esta sopa de garbanzos asiática que también está de auténtico lujo.
Antes de dejarte la receta, te recuerdo que en mi canal de Youtube estoy subiendo rutinas de entrenamiento para mantenernos activos durante esta cuarentena. Todas son sin nada que no haya por casa y adaptables a todos los nivles, así que, ¡anímate y échale un vistazo! Te dejo el enlace aquí.
Y vamos a lo que vamos, que esta sopa seguro que te está llamando a voces.
Ingredientes (1 ración):
1 huevo
1 diente de ajo
1 vaso de caldo o de agua
1 cucharada sopera de aceite de oliva
1 cucharadita de postre de pimentón dulce (puedes sustituir por media de pimentón dulce y media picante si quieres darle un toque picantón a la sopa)
1 par de rebanadas de pan (puedes usar pan de molde)
Jamón
Sal
Procedimiento:
Primero pela y pica el ajo muy finito y corta también el jamón en taquitos.
En un cazo, pon el aceite, el jamón y el ajo y cocina a fuego medio/bajo hasta que el ajo empiece a dorar.
Añade el pimentón, da un par de vueltas y agrega el caldo o el agua rápidamente para evitar que se queme el pimentón.
Añade la sal y deja cocer unos 15 o 20 minutos a fuego medio.
En un bol, pon las rebanadas de pan y el huevo y, cuando la sopa esté lista, vierte todo lo del cazo encima del bol con el pan y el huevo. Con el calor, el huevo se cocina. Sin embargo, si prefieres que el huevo quede más hecho, puedes añadirlo al cazo y dejarlo cocer un par de minutos hasta que se haga.
Como ves, es una receta súper fácilita, pero muy sabrosa que espero que disfrutes tanto como yo :)
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Fuente: este post proviene de La Vida a Bocados, donde puedes consultar el contenido original.
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