4 raciones
INGREDIENTES
900 g de medallones de cordero cortados en cubos (pierna)
5 cucharadas de aceite
6 clavos
6 cardamomos
6 semillas de pimienta negra
Un palo de canela de unos 25 cm
430 g de cebolla
4 dientes de ajo
10 g de jengibre fresco
2 cucharadas de semillas de cilantro
2 cucharadas de comino
1 guindilla
2 yogures griegos
1 cucharadita de café de garam masala (o majar 2 semillas de cilantro, 1 clavo, 1 cardamomo, 1 pellizco de nuez moscada, 1/4 cuchara de café de pimienta negra y otro 1/4 de comino)
3 ramas de cilantro fresco picado
ELABORACIÓN
Quitar toda la grasa que pueda tener el cordero.
Calentar tres cucharadas de aceite en una cazuela con la canela, los 6 clavos, 6 cardamomos y 6 semillas de pimienta. Freír un minuto.
Sellar los trozos de cordero y reservar.
Pelar y picar la cebolla, los ajos y el jengibre.
Añadir otras dos cucharadas de aceite a la cazuela. Freír un minuto, quitar las especias.
Añadir la cebolla, el ajo y el jengibre, rehogar durante cinco minutos a fuego medio.
Majar las semillas de cilantro, la guindilla y el comino con una cucharadita de té de sal.
Añadir la majada a la cebolla y freír durante otros cinco minutos, revolviendo de vez en cuando.
Echar el yogur y revolver. Cocinar durante dos minutos y añadir la carne y la salsa que soltara.
Si la carne no queda cubierta, añadir un poco de agua.
Subir el fuego al máximo, cuando hierva, bajar a fuego medio, tapar y cocinar una hora o hasta que la carne esté blanda.
Cuando esté listo, servir caliente espolvoreado con cilantro y, si se quiere, con arroz basmati.