No sé que tendrán esas bolitas de carne que antes de llegar a la mesa, ya faltan la mitad.
Mira que no hay manera. No acabo de entender que con lo fáciles que son de hacer, nos empeñemos en comprar esas bolas que venden en los supermercados.
Vaya sabor. Vaya ricura. Nada como la comida casera.
Y no lleva tanto tiempo. Probádlas y ya me contareis.
ALBONDIGAS de PAVO y POLLO con CHAMPIÑONES y PIMIENTO del PIQUILLO
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Si sois de los que os gusta leer, seguid aquí el paso a paso:
ALBONDIGAS de PAVO y POLLO con CHAMPIÑONES y PIMIENTO del PIQUILLO
INGREDIENTES
500 grs de carne picada mixta de pavo y pollo
1 lata de champiñones laminados (pueden ser enteros)
1 pimiento del piquillo en conserva
¼ de cebolla dulce
2 cucharadas de tomate natural tamizado
1 huevo
Ajo en polvo
1/2 litro de agua o de caldo suave
Aceite de oliva
Sal
Harina
PREPARACIÓN
Pelamos y rallamos la cebolla. Cortamos en láminas el pimiento. Escurrimos y lavamos los champiñones. Reservamos.
En un bol ponemos la carne picada junto con el huevo previamente batido y el ajo en polvo. Salamos y removemos bien para que quede todo bien integrado. Dejamos reposar un par de minutos la masa.
Vamos formando bolitas del tamaño preferido con la ayuda de nuestras manos y las pasamos por harina. Sacudimos el exceso y reservamos.
En una sartén ponemos aceite en cantidad suficiente para que floten nuestras albóndigas. Cuando adquiera temperatura, vamos friendo nuestras bolitas hasta que estén doraditas.
Sacamos y dejamos escurrir el aceite sobrante sobre papel absorbente.
En una cazuela, con un par de cucharadas de aceite de freír las albóndigas, sofreímos la cebolla y los champiñones cuidando de que no se doren demasiado. Agregamos el tomate y bajando el fuego, dejamos que cueza todo junto. Removemos de vez en cuando.
Añadimos las albóndigas y cuando la salsa vaya espesando, ya casi al final de la cocción, agregamos el pimiento laminado y removiendo la cazuela dejamos que finalicen.
Ya solo queda emplatar y disfrutar. ¡Buen provecho!.
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