Ingredientes:
Chivo lechal malagueño -yo uso pata pero se puede hacer con cualquier parte o mezcla de varias- (3)
Ajo (1 cabeza entera)
Laurel (3)
Tomillo seco (al gusto)
Pimentón picante (1 cucharadita)
Pimentón dulce (1 cucharada sopera)
Pimienta negra en grano (24)
Vino fino -de Jerez o de Montilla-Moriles- (1/2 botella)
Sal
Aceite de oliva
Preparación:
Trocea y limpia el chivo (te lo pueden preparar en la carnicería). Para asegurarte de que no tenga alguna astilla de hueso, pásalo por agua, repásalo con atención y seca cada porción de la carne.
Prepara una olla con un poco de aceite de oliva y dora la carne.
Añade, la pimienta en grano, los ajos, el laurel, el tomillo y los dos tipos de pimentón.
Sazona a tu gusto.
Mezcla bien para que se impregne la carne de todos los aromas.
Vierte el vino y remueve de nuevo dejando evaporar el alcohol.
Prueba el punto de sal y corrige si es necesario.
Cuando hierva, baja el fuego, tapa y deja cocer hasta que la carne se suelte del hueso con facilidad. Tardará entre 45 minutos y 1 hora dependiendo de lo tierna que sea la carne (de la edad del animal).
Destapa y sube el fuego para que evapore el exceso de líquido y la salsa espese.
Deja reposar.
Sirve.